domingo 22 de abril de 2012
MEDITANDO CON LOS ANGELES
He elaborado esta compilación de MEDITACIONES correspondiente al CURSO DE ANGELES CON ENFOQUE METAFÍSICO dictado por ALEXIIS, alexiis@speedy.com.ar
Corresponde
a todas y cada una de las 50 lecciones que conformaron este bello curso
y que publiqué en varias Páginas Web de todo el Mundo.
Esta
la entrego a todos los alumnos, que a través de estos 5 años de
recorrer este camino espiritual realicé, entregando estas lecciones dos
días a la semana durante todo el tiempo que duró este curso con
dedicación e infinito amor.
Espero lo disfruten y lo conserven como libro de consulta Angelical.
Los Amo y los llevo en mi corazón Sagrado
María Elena Syro P
Cali, Colombia
Sur América
MEDITANDO CON LOS ANGELES
La meditación es ciertamente una de las formas privilegiadas para comenzar el diálogo con el Ángel.
Meditar
regularmente procura comúnmente un inmenso beneficio en todos los
planos. Aumenta la sensación de bienestar psicofísico, hace más estable
el equilibrio emocional, mejora el emprendimiento y la memoria, potencia
la capacidad creativa e intuitiva.
La
meditación es una especie de tranquilizante del pensamiento, calma los
arrebatos de la emotividad y deja la superficie de la mente limpia y
serena como un espejo de agua. Y sobre este límpido lago, muy visible
desde lo alto, podrán posarse los pensamientos y las intuiciones que
provienen de los planos sutiles.
Generalmente,
nosotros ofrecemos a los Maestros Invisibles nuestra mente como una copa
llena de preocupaciones. La meditación vacía esta copa, hace que se
vuelva pulida y acogedora para que pueda rellenarse de pensamientos
divinos. El siguiente esquema es rápido y eficaz para quien pretenda
comenzar a meditar, síguelo punto por punto. Entre un punto y otro, toma
unos segundos de pausa:
1) Siéntate
cómodamente, espalda recta, manos apoyadas sobre las rodillas. No es
necesario estar en el suelo con las piernas cruzadas, si no se está
acostumbrado entran calambres; si el cuerpo está incómodo, la mente se
queda atenazada al cuerpo, por lo tanto, punto primero: estar cómodos.
2) Efectúa tres respiraciones lentas y profundas, inspira por la nariz y expira por la boca.
3)
Permanece por uno o dos minutos sin pensar en nada en particular.
Caerás en la cuenta de que todos los pensamientos se agolparán en tu
mente; analízalos imparcialmente, sin luchar para desecharlos.
4)
Cuando te aquietes, haz otra respiración muy lenta y profunda, y
después repite en el silencio de tu mente este antiguo mantra: SO HAM.
5) El mantra se repite con mucha calma y lentitud, durante más o menos 15 minutos; no es necesario nada más.
6)
Te ocurrirá seguramente que te distraerás, que recordarás que estás
siguiendo pensamientos cualesquiera y que no recitas el mantra. Vuelve a
repetirlo, concentrando la atención sobre las dos únicas sílabas.
Continúa durante 15 minutos.
La meditación es
serenidad, simplicidad, pureza. Debemos permitir a la mente resbalar
sobre las dos sílabas, libre y elástica, sin que se deba tratar ni
solicitar ningún encuentro espectacular. No te pongas tensa en la
expectativa de que “algo” debiera ocurrir.
Al
finalizar los quince minutos, te parecerá quizás que no ha pasado nada,
pero en las profundidades de tu ser se está creando un espacio azul.
Justo aquel espacio que generalmente está ahogado por pensamientos,
preocupaciones, emociones.
En ese espacio azul
puede tener lugar el diálogo con vos misma y con tu ser angelical, con
el Ángel que vive en el alma de cada uno.
Para
que la meditación dé sus frutos, es necesario practicarla
cotidianamente. Intenta conseguir un espacio de quince minutos en el
marco de tu jornada, te darás cuenta muy pronto que será el tiempo mejor
empleado…
QUE ES CIMENTACIÓN
Como
los ángeles son mensajeros celestiales, y por añadidura, alados, puede
parecerte algo extraño que el primer paso para conectarse con ellos se
llame Cimentación. ¿No sería más lógico desprenderse de los cimientos?
Contrariamente a lo que se pueda pensar, la cimentación es esencial para
cualquier tipo de trabajo espiritual, y te resultará sumamente útil
también en tu vida cotidiana.
Cimentarse
significa centrar la atención en el cuerpo y el estar presente en el
momento. Es el acto de reunir todas tus energías (mentales, emocionales y
físicas) y poner pensamientos y emociones en un equilibrio sereno y
armonioso dentro del cuerpo. Cuando estás cimentada resulta mucho más
fácil centrar selectivamente la atención ya estés trabajando en tu
empleo o en un proyecto, y visualizar u oír la voz de tu ángel, en todo
momento que desee meditar.
Pasamos gran parte de
la vida en piloto automático. Tal vez hayas tenido la experiencia,
durante un largo viaje al volante, de caer súbitamente en la cuenta de
que estás conduciendo. Has cubierto, diez, veinte kilómetros, quizás
más, cambiando de vías, haciendo señales y pisando los frenos cuando ha
sido necesario, pero tu mente estaba a “mil kilómetros de allí”.
De
vez en cuando todos soñamos despiertos. Cuando esto se torna habitual
se le llama “distracción”. Sólo Dios sabe cuántas cosas hemos guardado
en el sitio incorrecto, cuántas citas hemos olvidado, y qué errores
hemos cometido cuando el cuerpo estaba presente pero la mente en otra
parte. Eso ocurre cuando no queremos hacer lo que estamos haciendo, oír
lo que alguien dice o estar en donde estamos.
Si
no podemos apartarnos físicamente de una situación, la abandonamos
mentalmente. Nuestra atención pasa a otros pensamientos, otros tiempos,
otros lugares. Es fácil detectar a la persona que no presta atención,
porque su rostro tiene una expresión vacía: “Las luces están encendidas
pero no hay nadie en casa”.
Aprender a
cimentarte, a reunir y estabilizar tus energías, marcará en tu vida una
gran diferencia. Te permitirá estar presente por completo, alerta y
relajada, receptiva. Puedes comparar la cimentación al amarrar un bote
al muelle o plantar en tierra las clavijas para una carpa. Estar
cimentado es estar anclado, en conexión y a salvo.
Cimentarse
es simple, pero indispensable para establecer una comunicación
permanente con tú ángel. Es la base para el Proceso de Gracia.
Antes
de comenzar, busca en tu casa un sitio donde te sientas muy cómoda, es
decir el lugar donde ubicaste tu altar. El sencillo rito de encender una
vela, quemar una varilla de incienso, poner una flor fresca o llenar de
agua un hermoso cuenco te ayuda a calmar la mente y a establecer un
estado de ánimo reflexivo para la cimentación. Al altar que ya tienes
establecido, quizás te convenga agregar la imagen o la estatua de un
ángel que te agrade. Cada vez que meditas yo haces los ejercicios en ese
lugar, lo consagras. Entra y sal a conciencia y con respecto.
Descubrirás que tu lugar de meditación es como un templo. Almacenará la
energía que creas al meditar, facilitándote el vínculo con tu ángel cada
vez que regreses.
Una vez que tengas cierta
experiencia en la conversación con tus ángeles, puede llegar el momento
en que te atraiga la idea de hacer estos ejercicios al aire libre, en
contacto con la naturaleza. Busca un sitio discreto, donde se siente la
energía y sepas que nadie va a molestarte. Sin embargo, al principio te
resultará mucho más fácil concentrarte adentro, donde puedas eliminar
las distracciones.
Establecer contacto con los
planos sutiles de la inteligencia angélica consiste en escuchar. Se
requiere silencio y quietud. Busca un momento en que estés segura de no
ser interrumpida. Desconecta el teléfono, la radio y el televisor. A
algunos
les gusta meditar con una bella música
de fondo, pero tratándose de los ángeles hemos descubierto que es mejor
escucharlos en silencio.
Los ángeles mismos han
confirmado que: “Abre tu corazón a los sonidos del silencio y oirás las
maravillas de todo lo que existe”, y aconsejaron: “Recomendamos reservar
un rato dos veces al día, por la mañana y al atardecer, para aquietarse
y, en silencio, llenarse de luz blanca”.
Reserva ese tiempo para aquietarte y aquietar tu ambiente.
Durante
los ejercicios de cimentación no necesitarás anotar nada en tu
cuaderno, pero quizás te convenga tenerlo contigo, para registrar
cualquier pensamiento o sensación que se presente después de hacerlos.
El ejercicio en sí te será dado en forma separado.
Busca
zonas de tu vida en las que puedas no estar cimentada y piensa en el
efecto que eso tiene en tus relaciones, en tu trabajo y en otros
aspectos. A medida que continúes practicando el ejercicio, fíjate qué
diferencia percibes cuando te conectas con la tierra y el cielo.
Abrirte
a tu ángel, un ser que no vive en el mundo físico, es también cobrar
conciencia de tu propio ser no físico. Durante miles de años, en todo el
planeta, curanderos y místicos han explorado el cuerpo no físico,
llamado cuerpo sutil o energético. Este cuerpo y sus sutiles campos y
órganos existe en el mismo espacio que el cuerpo físico y también a su
alrededor. El campo que emana del cuerpo físico recibe el nombre de
aura.
Aunque es invisible para casi todos
nosotros, los psíquicos y otras personas dotadas de visión espiritual
pueden ver dentro del cuerpo los centros de energía o chacras, así como
el campo energético de alrededor; también las plantas y los animales
tienen cuerpos de energía sutil.
MEDITACIÓN 1 TRABAJAR EN GRUPO
Si
eres tan afortunada como para formar un pequeño grupo de personas en
sintonía que se reúnan para meditar y rezar, la ayuda que podréis
recibir será inmensa. Y también será inmensa la ayuda que podréis dar a
vuestros semejantes.
Os podréis reunir para
enviar energía curativa, por medio del Ángel, a personas enfermas.
Podréis enviar energías de luz, pensamientos de solidaridad,
comprensión, amor fraternal y desinteresado hacia lugares o personas.
Por
ejemplo, hacia una persona extraviada, una persona acusada
injustamente, hacia un lugar en el que ha ocurrido una catástrofe o un
desastre natural, o hacia una nación en guerra.
Antes
de iniciar la plegaria, lávense cuidadosamente las manos (símbolo de la
ablución ritual con la que había que acercarse al templo). Después
hablen entre ustedes para decidir sobre cómo utilizar la energía y hacia
quien dirigirla.
Después de esto, entrad por
algunos minutos en silenciosa meditación, fijando en vuestra mente la
imagen del Ángel. Pedidle con simplicidad que intervenga con sus
Legiones para sanar, aconsejar, proteger…
Terminad
con una plegaria colectiva de acción de gracias. Naturalmente esto no
es sino un bosquejo básico; ustedes podrán aportar vuestra propia
iniciativa con todas las modificaciones que consideren oportunas.
MEDITACIÓN 2 - CONOCE A TU ÁNGEL
Antes de leer lo que sigue, tranquiliza tu espíritu y prepárate exactamente como si debieses meditar con los ojos cerrados:
1) Siéntate cómoda y relajada.
2) Efectúa tres respiraciones lentas y profundas.
3)
Visualiza un gran cielo azul nocturno. Imagina que estás al aire libre
en una espléndida noche estival. Estás observando el cielo nocturno de
un azul intenso, tachonado de estrellas. Todo en torno tuyo es serenidad
y paz, envuelto por el color de la noche.
4)
Fija tu atención observando las estrellas, míralas, busca con calma,
contando por lo menos hasta siete. Parecerá que las estrellas huyen o
desaparecieran de tu visión; no te preocupes del resultado, no estás
compitiendo con el tiempo. Puede ser suficiente un minuto o diez,
utiliza el tiempo necesario.
5) Observa ahora
atentamente una sola estrella. Aíslala de las otras y mira cómo
resplandece en el cielo nocturno. Lentamente es punto luminoso se mueve.
Atraviesa el cielo y baja hacia dónde estás.
6)
Según se va acercando se vuelve cada vez más grande y luminosa. Su luz
alumbra el cielo nocturno, se ha vuelto ahora como un gran meteoro
luminoso.
7) Continúa observando esta
transformación. En el interior de esta luz se entrevé una figura.
Obsérvala atentamente mientras se va dibujando su silueta: es tu Ángel.
8)
Presta mucha atención a esta criatura. Anota mentalmente cada uno de
sus detalles. Imprímela bien en tu mente y en tu corazón. Es tu Ángel.
9)
Sonríele y camina a su encuentro con las manos tendidas. Él vendrá
hacia ti envolviéndote completamente con su luz. Serás todo uno con su
luz.
10) Entre tu realidad y la suya se ha
establecido un contacto. Mantente mentalmente en su luz, mientras que
logres visualizarlo, podrás comunicarte con él, podrás hablarle. Antes
que nada, dale las gracias por haber respondido a tu llamada.
11) Pídele ayuda y protección. Pídele que se quede a tu lado y que vuelva cuando tengas necesidad de Él.
12)
Mantén este contacto vivo en tu mente, no será difícil. La sensación es
tan agradable que difícilmente tenderás a abandonarla.
13)
Manifiéstale tu amor y tu gratitud. Usa las palabras que surgirán
directamente de tu corazón. No busques un lenguaje sofisticado. Háblale
como hablarías a tu imagen reflejada en un espejo.
14) Prométele la asiduidad de tu pensamiento y la autenticidad de tu amor. El Ángel es verdad y pureza además de energía.
MEDITACIÓN 3 - PARA CONECTARNOS CON NUESTRO ÁNGEL GUARDIÁN
1)
Siéntate cómodamente frente a plantas y flores, obsérvalas, conéctate
con la belleza de la naturaleza que se encuentra frente tuyo. Inspira
esa belleza y siente como esta energía de la belleza llega a tu corazón.
Desenfoca la vista y comenzarás a ver una luminosidad que irradian las
plantas que se encuentran frente tuyo. Inspira profundamente y siente
como esa energía, con cada inspiración llena tu corazón y comienzas a
sentir una sensación de amor que sale de tu corazón, pasando por tu
cabeza y se conecta con la planta que se encuentra frente tuyo, y la
sensación de amor sigue creciendo.
2) Plena de
energía de Amor cierra tus ojos e imagina el cielo estrellado a tu
alrededor, imagina que todas las estrellas se conectan contigo. Inspira
profundamente y siente como el Amor en tu interior crece. Siente como
esa energía sale de vos a través de todos tus poros e ilumina tu cuerpo
energético, va hacia el cosmos y regresa llenándote de más Amor. Tu ser
está conectado con el universo, pleno de energía.
3)
Visualiza sobre tu cabeza la imagen de un Ángel. Imagina que la luz que
sale desde el centro del corazón del Ángel es blanca y dorada. Inspira y
siente como esta luz cubre tu cabeza y tu rostro. Comenzarás a sentir
un cosquilleo en tu coronilla, un tibio calor que te envuelve. Inspira
aún más profundamente y siente que esa luz llega a tu corazón. Siente
paz y alegría plena. Cuando sientas esto pide a tu Ángel que te dé una
muestra de su Amor generando una coincidencia favorable para vos y hace
un pedido simple para sentir su acción en tu vida.
4)
Lleva tus manos hacia el corazón en señal de agradecimiento a Dios y a
tu Ángel. Conserva lo más posible el estado de felicidad que está en vos
en espera de la señal que le pediste a tu ángel. Una vez que sientas la
presencia de tu ángel y su acción en tu vida, te encuentras preparada
para profundizar aún más esa relación y transformarte en un canal de la
luz del Reino Angélico en nuestra tierra. No está demás que antes de
dormir repitas la tradicional plegaria de nuestra infancia: “Ángel de la
guarda, dulce compañía, no me desampares ni de noche ni de día”,
solamente para que nuestro protector sepa que lo tenemos presente.
MEDITACIÓN 4 - TRABAJO CONJUNTO
Los
convoquemos o no, los ángeles están con nosotros en nuestra vida
cotidiana, dispuestos, deseosos y encantados de ayudarnos. No importa lo
que hagamos: meditar, hacer compras, conducir el auto o bucear a
profundidad, ninguna tarea es demasiado pequeña, ningún objetivo
demasiado grandioso como para no merecer su afectuosa atención.
Ahora
veremos algunos ejemplos de las maneras en que nuestros compañeros
celestiales acompañan y animan las actividades cotidianas, y de cómo
puedes solicitar su ayuda para alcanzar tus objetivos. Algunos libros
contemporáneos sobre los ángeles se concentran en las intervenciones
milagrosas, incidentes en que se salvaron vidas y se evitaron
calamidades. Aunque son apasionantes, indiscutiblemente, esos
acontecimientos suelen producirse sólo una vez en la vida, sin embargo
los ángeles están muy presentes y disponibles para todos y cada uno de
nosotros, todos los días y no sólo en ocasiones especiales.
Por
dispuestos que estén a ayudarnos, los ángeles no son hadas de la buena
suerte que toquen tu copa con una varita mágica y te otorguen todos tus
deseos. Pueden ayudarte a alcanzar lo que desea tu corazón, pero no
crear tu destino. Eso sólo pueden hacerlo Dios y tú. Lo que hacen los
ángeles es servir a Dios mediante cada uno de nosotros. En realidad, más
de uno de nuestros invisibles ayudantes nos han sugerido, en muchas
ocasiones, que los humanos somos las manos de los ángeles y la voz de
sus mensajes inspirados.
Cuando aprendes a
conversar con tus ángeles, entras en una asociación de trabajo con
ellos. Un socio es alguien que trabaja contigo, que comparte tu alegría,
te arroja la pelota y te respalda en tiempos de vacas flacas. Para
desarrollar esa sociedad, basta con acordarte de pedir ayuda a tus
ángeles, y con frecuencia se te presentarán cuando realmente los
necesites, aunque hayas olvidado llamarlos.
Pide
a tus ángeles que te acompañen durante tu vida cotidiana. Pídeles que
te aquieten o te guíen las manos cuando hagas algo que requiera
habilidad y precisión. Pídeles que te conduzcan a alojamientos adecuados
si estás en una ciudad que no conoces. Pídeles que aseguren un viaje y
un regreso sin peligros y que faciliten los trasbordos cuando viajéis,
tú o tus personas queridas. Cuando quieras expandir tus conocimientos,
tu capacidad o tus habilidades, no dejes de pedírselo a tus ángeles.
Uno
de los beneficios de recurrir a los ángeles es que el acto de pedir
elevará tu manera de encarar las cosas. Al refinar tu actitud, al
abrirte a la afirmación y a un punto de vista positivo, realizas tus
posibilidades de éxito en todo lo que haces o deseas lograr. Al
visualizar el mejor resultado posible, atraes las energías positivas
para que fluyan hacia ti.
Desde los tiempos más
remotos, la gente ha trabajado con las energías positivas para crear lo
que deseaban en el plano físico. Como resultado han crecido culturas y
civilizaciones. A lo largo de milenios, ciertas maneras de operar
energéticamente han resultado invariablemente efectivas para el
propósito de la manifestación. Reciben distintos nombres de los
diferentes sistemas y escuelas de pensamiento; algunos cambian el orden
de la ejecución. Pero las leyes o pasos siguen siendo los mismos. En
realidad son muy simples y, con ayuda de tu ángel, puedes utilizarlos
para alcanzar tus objetivos.
Si bien hay muchas
variaciones y agregados al proceso de manifestación, existen sólo cinco
principios que se aplican universalmente. Con la asistencia angélica
puedes ampliar notablemente el poder de estas leyes, porque la
naturaleza angélica contiene un ingrediente vital para la manifestación:
una amorosa aceptación. Como los ángeles existen en un plano de
pensamiento superior, más próximo al reino de la Fuente Creativa, pueden
ayudarte a sembrar tu meta en la dimensión donde el pensamiento es,
realmente, creación.
1) El primer paso en la
manifestación es la intención. Tomas la decisión consciente de tener lo
que deseas. Si no estás segura de desearlo de verdad, dedica unos
minutos a imaginarte teniéndolo. Si no puedes visualizar o sentir cómo
es, quizás no lo quieras del todo. O tal vez no crees poder tenerlo. A
veces dejamos de desear algo cuando pensamos que no podemos tenerlo,
aunque no dejemos de quererlo, por supuesto; simplemente, negamos el
deseo. Con frecuencia, el miedo a la desilusión debilita la intención.
Tenemos miedo de no conseguir lo que deseamos. Este miedo se crea en la
sensación de poco valer.
2) El segundo paso para
alcanzar tu meta es el compromiso de obtenerla… y estar dispuesto a
aceptar todo lo que te traiga. Tienes que estar segura. Nada de
melancólicos “tal vez” o “si yo pudiera”. Nada de ambivalencias. Este
paso requiere que concentres tu intención y experimentes la convicción
de que puedes tenerlo. ¿Alguna vez obtuviste algo que deseabas
desesperadamente, sólo para descubrir que, después de todo, no lo
querías? ¿O no supiste qué hacer con lo obtenido? La culpa está en la
falta de compromiso.
3) El tercer paso requiere
afirmación: reclamar lo que deseas utilizando una visualización,
afirmándolo en voz alta y escribiéndolo o dibujándolo. Puedes hacer
cualquiera de estas tres cosas, pero cuantas más hagas, mejor, porque
cada una activa tu intención y comienza a establecerla en el reino
físico. Para visualizar el logro de tu objetivo experiméntalo tan
plenamente como puedas, por medio de tantos sentidos como te sea
posible: debes verlo y sentirlo, oírlo, tocarlo y hasta degustarlo, si
se puede.
Afirma lo que deseas diciendo en voz
alta: “Ángel quiero tener…. “. Recuerda las palabras de la Biblia: “En
el principio fue el verbo”. El sonido de tu voz crea una onda y el poder
de tu intención la claridad de tu visualización, dan esa onda potencia y
duración.
Algunas personas hacen un mapa del
tesoro de lo que desean, recordando figuras que ilustren su meta y
pegándolas en una hoja de papel o cartón.
Cada
uno de estos actos reforzará tu convicción interior, iniciando la
realización de lo que desea. Estás cocreando con nuestro Creador, con la
ayuda de tus bienamados ángeles. Tu parte consiste en concebir todo el
cuadro y cómo quieres que sea.
4) El cuarto paso
es la gratitud, dar gracias por la manifestación, como si ya se hubiera
producido. Existe ya en otra dimensión, que es familiar a nuestros
alados colegas. Sé generosa con tu agradecimiento y tus alabanzas a la
Fuente de Todo.
5) El quinto paso es el más
difícil: el desprendimiento. Tienes que liberar tu meta hacia el
Universo, para que este pueda hacerse cargo y entregar lo que has
pedido. Cinco breves palabras te ayudarán a recordarlo: “Déjalo y deja a
Dios”.
MEDITACION 5 - ORACIONES LITÚRGICAS
Las siguientes oraciones se han recopilado de Misales en uso en la Iglesia Católica y pertenecen a varias liturgias canónicas.
AL ÁNGEL CUSTODIO
“Oh
Dios que en tu misteriosa Providencia mandas del cielo a tus ángeles
para nuestra custodia y protección, haz que en el camino de nuestra vida
podamos ser sustentados con su ayuda y alcanzar con ellos la eterna
felicidad. Por Cristo
Nuestro Señor.” (Liturgia de los Ángeles Custodios)
PARA LA PROTECCIÓN PERSONAL
“Oh
Dios, que llamas a los Ángeles y a los hombres a cooperar en tu diseño
de salvación, concédenos a nosotros, peregrinos sobre esta Tierra la
protección de sus espíritus Beatos, que en el cielo están delante de Ti
para servirte y que contemplan la gloria de tu faz. Por Cristo nuestro
Señor”. (Liturgia de San Miguel)
AL ÁNGEL DE LA GLORIA
“Nosotros
proclamamos, Señor, tu gloria que resplandece en los ángeles y en los
arcángeles: honrado a estos mensajeros tuyos, exaltamos tu infinita
bondad: en los Espíritus Beatos Tú nos revelas cuán grande eres y
amable, más allá de cualquier criatura, por Cristo nuestro señor”.
(Prefacio de los ángeles)
ORACIÓN PARA QUIEN VIAJA
“Oh
Dios, que has permitido a los hijos de Israel atravesar el mar con los
pies secos… concédenos un camino favorable y un tiempo sereno y
tranquilo, de modo que, acompañados por tu santo ángel, podamos llegar a
la meta a la que nos dirigimos, y al final, al puerto de la eterna
salvación. Por Cristo nuestro Señor” (Liturgia del Itinerario)
AL ÁNGEL DE LA CASA
“Visita,
Señor, nuestra casa y aleja de nosotros toda insidia del enemigo
infernal; tus ángeles santos nos custodien en la paz y tu bendición
siempre esté sobre nosotros. Por Cristo nuestro Señor”. (Liturgia de
Completas)
A LOS TRES ÁNGELES
Venga
del Cielo a nuestras casas El ángel de la paz, Miguel, venga Portador
de serena paz y relegue al infierno Las guerras, fuentes de tantas
lágrimas.
Venga Gabriel, el ángel de la fuerza, Echa a los antiguos enemigos y visite los templos
Queridos al Cielo, que Él, triunfador, Ha hecho elevar sobre la Tierra.
Nos
asista Rafael, el ángel que cuida La salud; venga a curar a todos
nuestros enfermos Y a dirigir nuestros inciertos pasos Por los senderos
de la vida”. (Liturgia de los Ángeles Custodios)
MEDITACION 6 - A LOS ÁNGELES CONSOLADORES
Es
una invocación particularísima para ser dirigida mentalmente hacia los
lugares de guerra o en los que hayan ocurrido estragos, torturas, actos
de terrorismo, matanzas realizadas por el hombre o por las fuerzas de la
naturaleza, graves incidentes con muchas víctimas.
Fue
compuesta para el Ghetto de Varsovia. Todavía hoy se copia en tiras de
papel que enrolladas son depositadas donde sea posible, entre las
piedras, en las fisuras de los muros y en los muchos sitios de
sufrimiento sobre la Tierra.
Si se acompaña con
pensamientos compasivos, posee un gran poder evocador. Solicita la
intervención del Deva Consolador. Es la primera vez que su publicación
es autorizada, pues ya es tiempo de que difundamos esta costumbre
reparadora.
Como pétalos de rosas en un desierto de sal,
Amor, compasión, dulzura,
Pensamientos comprensivos
Desciendan a estos lugares.
Que los cielos se abran
Y ángeles misericordiosos hagan descender
Miel y ambrosía para curar las heridas:
A través del tiempo y el espacio.
De los reinos oscuros
De donde locura y terror han surgido
Locura y terror retornen
Y que la Nada los trague.
Que la Luz envuelva con su rayo
Toda vida truncada, y compense
Cada gota de sangre, y
Cada lágrima.
Que la nueva vida sea fácil
Y el karma positivo.
Devas Consoladores, lleven a quien queda
Resignación y fortaleza.
Y que el Hombre comprenda
Y la Tierra no olvide…
MEDITACIÓN 7 - ORACIONES ESPECIALES
Siempre
del libro de Franceso, cito textualmente algunas oraciones,
explícitamente dirigidas a los Ángeles Protectores de algunos oficios.
Para las Fuerzas del Orden
Oh
Sumo Caudillo de las Milicias Angélicas, San Miguel Arcángel, nosotros
te invocamos como nuestro protector. Como Tú reconoces que toda tu
autoridad es de Dios Omnipotente, así con tu ayuda nosotros queremos que
todo nuestro servicio se cumpla como suprema alabanza de la Justicia y
del Amor de Dios, en la caridad del prójimo y en la fidelidad a la
Patria.
Para el honor de nuestro nombre, te
rezamos además humildemente, o nuestro amable Protector, para que
custodies en nuestra conciencia aquel orden y aquella paz de Cristo que
son el presupuesto del orden y de la paz que tenemos la noble misión de
tutelar. Amén.
Para los Banqueros
Oh,
sabio San Miguel Arcángel, que sujetas en tu mano la balanza de la
divina justicia, haz que en nuestra cotidiana preocupación de custodiar,
administrar y distribuir el dinero de otros, Tu protección nos guíe
siempre a valorar cada cosa con honestidad, justicia y caridad.
Alcánzanos
de Dios, te lo suplicamos, que nuestra cuenta personal se cierre cada
día, y siempre, con la verdadera e insuperable ganancia que es la paz
del corazón en Jesús Señor Nuestro. Amén.
Para los Radiólogos
Oh,
San Miguel Arcángel, que sois el más antiguo contemplador de la luz
eterna que es invisible a nuestros ojos, mándanos un rayo de ella a
nuestro corazón.
Así, iluminados por la Verdad, y
purificados por el Amor, nos acercaremos más dignamente a nuestros
aparatos liberadores de imponderables energías, adorando la sabiduría de
Dios.
Oh, luminoso Protector nuestro, que
conoces a qué precioso remedio y a qué sutil peligro nos acercamos
diariamente, haz que el misterio de las radiaciones emane para nosotros
luz de vida y nunca tinieblas de muerte; y que la liberación de los
males corporales nos induzca a adorar la bondad infinita de Dios y de
nuestro Señor Jesús Cristo. Amén.
Para los Paracaidistas
Eterno
e inmenso Dios que creaste los eternos espacios y mediste sus
desmesuradas profundidades, mira, benigno, a nosotros los paracaidistas
que, en el cumplimiento del deber, saltando de nuestros aparatos nos
lanzamos en la inmensidad de los cielos.
Manda
al Arcángel San Miguel como nuestro custodio y protege nuestro intrépido
vuelo. Como niebla al sol, nuestros enemigos se disipen frente a
nosotros.
Cándida como la seda del paracaídas sea siempre nuestra fe e indómito nuestro coraje.
Bendice,
Señor, nuestra Patria, las familias, nuestros seres queridos; para
ellos en el alba, y en el ocaso sea siempre nuestra vida, y para
nosotros, o Señor, Tu glorificada sonrisa. Así sea.
A Nuestro Ángel Custodio
Ángel Mío protector Dame la fuerza para realizar Los propósitos de crecimiento interior De colaboración y de servicio.
Mi voluntad es pura, Potenciada con tu fuerza. Ayúdame en las cosas cotidianas, En las materiales y espirituales.
Desarrolla en mí tus dotes, Que yo vea mis defectos, Y que posea compasión y paciencia.
Guía
mis pensamientos, los deseos, las acciones Hacia aquello que es más
justo Para mi crecimiento espiritual Y dame la capacidad de aceptar Lo
que no logro comprender.
Oración de Clausura
Te saludo, Ángel nuestro, Protector y aliado.
Te saludo, Señor del Lugar, Y a vosotros, Ángeles y Devas Que habéis estado cerca.
Vuestra potencia acompañe nuestro intento Y lo deposite ante el trono del Inmenso Donde la luz asciende en remolinos llameantes.
Que nuestra llamada sea aceptada y descienda Del Espíritu a la materia Según nuestro karma.
Volved a correr el velo Y que el Plano se cumpla.
MEDITACION 8 - ORACIONES A LOS ANGELES CONSTRUCTORES
(Oración
para las mujeres embarazadas) ¡Os saludo, legiones de Devas
constructores! Venid en nuestra ayuda. Custodiad a esta criatura que
nace En el mundo de los hombres.
Dad fuerzas a la madre, Enviad vuestros Ángeles benévolos Que asistan al nacimiento Y anuncian el alba de la nueva vida.
Llevad al hijo que nace La bendición del Señor.
¡Os
saludo, legiones de Devas Constructores! Venid en nuestra ayuda. Guiad
al niño que nace Al mundo de los hombres Para que su Divinidad interior
sea liberada.
AL ÁNGEL DEL GRUPO
Es
una oración para recitar cuando hay un grupo que se ha confiado a la
protección de un Ángel. Hay que recitarla cada vez que el grupo se
reúne. Al final, antes de cada uno se aleje para tomar su propio camino,
se recitará la siguiente fórmula:
Ángel
nuestro, protector y aliado, Recoge y transforma nuestros pensamientos
de amor. Abre las puertas entre tu mundo de luz Y nuestro mundo de
niebla. Guía nuestros pasos sobre el punto que nos une Y que el puente
sea ancho y seguro. Acerca de nosotros tus Hermano Para que escuchen
nuestra llamada. Aleja las nieblas de la materia Para que vea nuestro
intento de amor Y nuestro corazón puro. Dejad abiertas las puertas para
que invocándoos Podemos sentiros cerca. Con vuestra ayuda Nos sea dado
proteger, consolar, curar. Nos sea dado ayudar a quien sufre En el
cuerpo y en el espíritu. Vuestra guía extienda nuestros conocimientos
Pues conocer es servir.
MEDITACIÓN 9 - MEDITANDO CON TU ÁNGEL
ABRIRTE A TU ÁNGEL
Ten a mano tu libreta de anotaciones y tu bolígrafo. Al tope de una página en blanco, escribe: “Abrirme a mi Ángel”, y la fecha
1)
Siéntate en tu lugar sagrado, con los pies bien apoyados en el suelo y
los ojos cerrados. Siente la presencia de tu Ángel, que se acerca cada
vez más. Imagina que te envuelve suavemente con sus alas.
2)
Mientras inhalas y exhalas lentamente, siente o percibe la presencia de
tu Ángel, que te extiende los brazos. Respira esa proximidad y deja que
dentro de ti surja una pregunta.
3) Concentra
la atención en tu corazón. Pon en tu corazón la pregunta que deseas
formular, visualizando las palabras escritas allí.
4) Cuando sientas las palabras en tu corazón, abre los ojos y anota la pregunta en tu cuaderno. Vuelve a cerrar los ojos.
5)
Con las palabras de tu pregunta en el corazón y en la mente conéctate
con tu profundo deseo de oír la voz de tu ángel. Escucha en tu corazón y
en tu garganta. Pon atención a cualquier sentimiento que surja. Los
ángeles llegan a nosotros a través de los sentimientos, de modo que esa
pueda ser la primera forma de contacto. Permite esos sentimientos y
permanece abierto a las palabras que se presenten.
6) Anota todo lo que recibas, sean palabras, imágenes o sensaciones.
7) Recuerda agradecer a tu ángel su mensaje.
8) Lee lo que has recibido.
Observa
las sensaciones que te despierta el mensaje. Puede sorprenderte o
quizás te conmueva. Si las palabras te llenan los ojos de lágrimas o si
te sientes conmovida, sabrás que tu ángel ha hablado a través de ti.
Los
ángeles se presentan a nosotros de modo que podamos recibirlos. Si no
estás segura de haber recibido nada, vuelve a cerrar los ojos y repite
el ejercicio desde el comienzo, estableciendo una conexión más potente
con tu deseo de comunicarte con tu ángel. Acepta con gratitud lo que
recibas. No deseches ni critiques lo que aparezca. Porque eso cerrara tu
corazón, bloqueando la comunicación. Cuando aceptas, te abres; cuando
estás abierta, es mucho más probable que recibas.
MEDITACIÓN 10 - APERTURA HACIA EL ÁNGEL
Siéntate
cómodamente en tu “espacio sagrado” con los pies bien apoyados contra
el suelo y los ojos cerrados. Sentí la presencia de tu Ángel cada vez
más cerca de ti. Imagínate que sus alas te envuelven dulcemente.
Inspira
y expira suavemente y sentí la presencia de tu Ángel cada vez más cerca
de ti. Inspira esta intimidad y deja que surja de tu interior una
pregunta.
Concentra la atención en tu corazón.
Presenta la pregunta que piensas hacer en tu corazón, visualizando en él
las palabras escritas.
Cuando escuches las
palabras en tu corazón, abre los ojos y escribí la pregunta en un papel.
Vuelve a cerrar los ojos. Con las palabras de tu pregunta en tu corazón
y en tu mente, entra en contacto con tu profundo deseo de escuchar la
voz de tu Ángel. Escucha en tu corazón y en tu garganta. Mantente
consciente de cada sensación que emerge. Los Ángeles llegan a nosotros a
través de los sentimientos, de modo que ésta puede ser la primera forma
de contacto. Deja salir los sentimientos y ábrete a las palabras que
llegan.
Escribí todo lo que recibas, ya sean palabras, imágenes o sensaciones.
Recuerda agradecer a tu Ángel el mensaje. Relee lo que has recibido.
MEDITACIÓN 11 - LA LUZ
Hoy vamos a intensificar la luz que llevamos en nuestro interior para que brille con su real luminosidad.
Vamos
a hacer una verificación física, comenzando por los pies: ¿En qué
posición están, y qué hacen? Vamos a moverlos de un lado a otro, y vamos
a permitir que la luz los abrace. ¿Y las piernas? ¿Están estiradas o
encogidas? ¿Están cómodas? Permitamos que la luz penetre en las piernas
para sentir que abre canales de flexibilidad que mantienen viva la luz.
¿Las manos están cómodas y sueltas, o tensas mientas sostienen esta
hoja? ¿Los brazos están pesados, livianos, doblados? Incorporemos la luz
y visualicemos los brazos como alas de luz, listas a volar en cualquier
momento. Ahora dirijamos la concentración a nuestro centro, la zona del
cuerpo donde los órganos realizan experimentos químicos y el corazón
bombea la energía de la sangre al resto del cuerpo. Ahora inspiremos
profundamente y aflojemos todos los músculos del estómago. Aflojemos la
espalda, hagamos contorsiones y empujemos como si fuéramos pollitos que
tratan de salir del cascarón. Ahora otra inspiración más, pero esta vez
de luz pura.
Ahora viene la parte difícil. Vamos
a relajar la mente, que muy probablemente sentimos alojada en la
cabeza. Relajamos los músculos del cuellos, los estiramos suavemente y
sentimos que el cuello desaparece. Ahora la cabeza queda colgando en el
espacio. ¿Qué vemos, oímos, olemos y percibimos por el gusto? Relajemos
los músculos del rostro. Dejemos que la mente vuele libremente por un
instante y luego pongámosla en foco para hacer algunas comprobaciones
del estado actual de conciencia.
¿Cómo actuamos?
¿Cuál es el tono que prevalece en nuestra vida últimamente? ¿Estamos
actuando como adultos plagados de responsabilidades que nadie puede
comprender ni ayudarnos a superar? Si es así, recordemos que somos hijos
de la luz; conforme aprendamos a jugar con el fluir divino de la vida,
las responsabilidades cambian y se convierten en juegos.
Comencemos
a imaginar la forma en que las pequeñas insatisfacciones se proyectan
en nuestra vida. Si estamos preocupados por algo, tomemos conciencia de
que la preocupación no es un problema para los hijos de la luz; entonces
vamos a entregarla a los Ángeles. Si nos sentimos con poca energía,
vamos a pedirle a los Ángeles que nos ayuden a redescubrir la energía
del hijo de la luz. Tristeza o depresión significan que la luz se va
opacando y que el adulto que hay en nosotros decidió apagarla para dejar
de sentir dolor. Seamos hijos de la luz y retomemos la conexión con la
alegría de la niñez iluminada. Volvamos a encender la luz y dejemos que
brille intensamente. ¡Los Ángeles están para ayudarnos! Pidámosles
alegría para reemplazar la tristeza.
¿Somos
felices? Tenemos que saber en nuestro interior que esa felicidad no se
debe a ese nuevo juguete maravilloso que tenemos o al fantástico puesto
de trabajo que conseguimos ni a la hermosa relación que tenemos con otra
persona. La felicidad que sentimos se debe a que nos amamos a nosotros
mismos y a que permitimos que nos sucedan cosas agradables. Si las
circunstancias cambiaran, no dejaríamos de ser felices. Ya que la
felicidad viene desde el interior y todos los hijos de la luz sabemos
cómo tener unicidad con la esencia de la felicidad.
¿Somos
amigables? ¿Permitimos que los demás entran y salgan de nuestra vida?
Un hijo de la luz es amigable y atrae personas amigables y mágicas. Las
preguntas anteriores son sólo algunas de las que podemos hacernos y
pueden permitirnos un muy buen esclarecimiento interior sobre zonas de
la vida en las que quisiéramos que la luz fuera más intensa.
Este
ejercicio no tiene como objetivo que se lo tome con demasiada seriedad.
Es tan sólo una forma de comprobación para que concentremos la atención
en el hecho de que somos hijos de la Luz. No siempre recordamos que
somos hijos de la luz y que tenemos un padre que nos nutre – el poder
superior del universo que por siempre nos ama, que los Ángeles mantienen
y personalizan para nosotros – que puede encargarse de los problemas
que no son realmente nuestros. Lo único que necesitamos hacer es
recordar que podemos entregar nuestros problemas de adultos a fin de que
sean resueltos para el mayor bienestar del universo, soltarnos y
dejárselos a los Ángeles.
MEDITACIÓN - 12 AFIRMACIONES DE SUEÑOS
Las
afirmaciones establecen un estado mental positivo y de aceptación.
Cuando se las repite una y otra vez, sobre todo expresándolas con mucha
convicción, las afirmaciones entran en el inconsciente, alineándolo con
la conciencia. Las Afirmaciones resuenan más cuando las acompaña una
visualización. Mientras pronuncias tu afirmación, es conveniente que la
visualices o imagines.
Si no sueles recordar tus sueños, prueba con esto:
Afirmación Nº 1
Soñaré. Recordaré mi sueño. Mañana despertaré y escribiré mi sueño.
Al
pronunciar estas palabras, imagínate dormida y soñando. Luego
visualízate al despertar, alargando la mano hacia el cuaderno donde
pones por escrito tus sueños o los mensajes de tus ángeles para
anotarlo. Si tienes buena memoria para tus sueños, puedes saltear la
primera afirmación y pasar a esta.
Afirmación Nº 2
Estoy abierto a ti, ángel mío. Te invito a visitarme en mi sueño.
Siempre
es mejor, al crear tus afirmaciones, invocar a tu Ángel por su nombre,
si lo conoces. Elige tus propias palabras, utilizando los dos ejemplos
citados como guía. También en este caso, cuanto más te conectes con tus
sentimientos, más poder darás a tu afirmación.
Es
útil visualizar, mientras pronuncias tu afirmación, un rayo de luz
rosada o dorada que brota de tu corazón y que te conecta con el corazón
de tu Ángel. O puedes imaginar un lugar hermoso donde unirte con tu
Ángel. Repite tu afirmación mientras imagines la escena.
Una
vez que has establecido contacto con tu Ángel en tus sueños, puedes
comenzar a trabajar con Él en temas específicos, formulando preguntas en
el momento de quedarte dormida. Esto causa el mismo efecto que escribir
a tu Ángel. En realidad, te conviene escribir las preguntas en una hoja
de papel y ponerlas bajo la almohada. Aunque lo hagas, es buena idea
vocalizar también la afirmación.
Afirmación Nº 3
Querido
Ángel: en mi sueño de esta noche querría una aclaración sobre ….. o,
Por favor, esclaréceme sobre… o, Ayúdame a comprender, por favor…
Utiliza
tu intención como punto central para sembrar el estado de sueño. Cuando
estés quedándote dormida, imagina que tienes un sueño en el que tu
Ángel viene a ti. Inventa el sueño, tal como querrías tenerlo. El sueño
que recuerdes durante la mañana contendrá algunos elementos o rastros de
esa semilla. Afirma que es así, aunque debas hacer de detective para
hallar la clave.
La clave para identificar a
nuestros Ángeles en nuestros sueños, es sentir el tono del sueño. Las
emociones o sensaciones que hayas tenido en la atmósfera, una cualidad o
hecho que resulte fuera de lo común, exótico o ultraterreno, pueden
señalar la presencia de los ángeles.
MEDITACIÓN 13 - LIMPIEZA DEL ALMA
Imaginemos
a la Energía Cósmica como un enorme diamante, con infinitas facetas
cortadas a la perfección. De cada faceta emana un esquema de luz
singular, más hermoso y magnífico que cualquier color visible en la
tierra. La luz de cada faceta se concentra en cada ser humano. Es la luz
del don que tenemos para ofrecer al mundo; es la luz que nos une a Dios
y a los demás seres humanos. Todos formamos parte de un espectro de
colores hermosos. Cuando tenemos la libertad de ser nosotros mismos, la
luz nos emana del alma en forma de un esquema brillante y singular. La
luz brilla con más intensidad cuando somos realmente nosotros mismos.
Una
forma de reconocer el lodo o el polvo que opaca nuestra luz es mirarnos
con honestidad e identificar los esquemas que nos provocan la duda y la
infelicidad. Para ello, vamos a tomarnos un momento para meditar.
Ingresamos
en el estado de relajación y, cuando estamos listos, comenzamos a ir
hacia adentro y a conectarnos con el color de nuestra luz. Quizás no
lleguemos a ver un color definido, así que nos concentraremos en nuestro
propio centro de energía, la fuente del yo.
Les
pedimos a los Ángeles que nos muestren parte del lodo o el polvo que
oscurece nuestro brillo. Prestemos atención, y cuando la mente registre
algo que queramos eliminar, vamos a visualizar a los Ángeles limpiadores
como frotan el lugar con una solución limpiadora y el lodo se desvanece
en el universo para ser transmutado. Seamos creativas, y si registramos
las experiencias en un diario, podemos anotar ésta para poder releerla
de vez en cuando.
Los Ángeles nos ayudan a ser
auténticos y fieles a nosotros mismos. Y lo hacen de maneras variadas,
ya que poseen el programa, o plano, que nosotros ayudamos a crear antes
de llegar a esta existencia. Cuando nos alejamos demasiado del centro,
los Ángeles dejan huellas sutiles para recordarnos que debemos volver al
camino y ser nosotros mismos, algo que no siempre resulta fácil.
Cuando
nos enfrentamos a situaciones rutinarias, por lo general comenzamos a
comportarnos como si hubiéramos conectado el piloto automático. El auto
descubrimiento es lo que nos permite descubrir quiénes somos y cuáles
son los programas automáticos que operan en nuestras vidas. Cuando
descubrimos un esquema, nos damos la oportunidad de seguir aplicándolo o
no. E inclusive, cuando decidimos continuar, el esquema cambia porque
ya somos conscientes de lo que estamos haciendo.
El
propósito de esta práctica es que lleguemos a ser auténticos: la broma
está en que no existe un truco ni una clave especial para llegar a ser
auténticos. La autenticidad evalúa lo que de singular tiene cada ser
humano. Así que tal vez sea necesario que cada uno realice alteraciones
en las prácticas aquí presentadas para adaptarlas mejor a su alma.
La
autenticidad proviene del verdadero conocimiento de uno mismo.
“Conócete y sabrás cómo vivir”, reza el dicho. Cuando llegamos a
conocernos, sabemos cómo entregarnos. Si no podemos entregarnos, nos
veremos atrapados en la obsesión por nosotros mismos y, conociéndonos,
esa obsesión nos jugará una mala pasada. Si esto sucede, conviene que
nos tranquilicemos y que les pidamos a los Ángeles que nos recuerden
quiénes somos y cuál es nuestra misión aquí.
Entonces HAGÁMOSLO y pasaremos el mejor momento que pudiéramos imaginar.
Cuando
somos verdaderamente nosotros mismos, transmitimos un mensaje de amor
que genera una reacción en cadena positiva en el universo. El simple
hecho de pasar caminando junto a alguien en la calle podría cambiar la
vida de esa persona. Podemos ofrecerles a otros seres humanos la
experiencia angélica sin saberlo, así como recibimos experiencias de
ciertas personas y nos preguntamos si se trata de Ángeles.
A
veces cuando intentamos enviar mensajes, el destinatario no los recibe;
y luego, cuando ni siquiera lo intentamos, el mensaje le llega con gran
nitidez. Enviar transmisiones positivas irradiando nuestra luz y la luz
de los Ángeles es una forma de estimularlas. Por ejemplo, podemos
enviar conscientemente bendiciones en rayos de luz o en alas de Ángel a
cierta persona, lugar o grupo.
También podemos
transmitir el mensaje de que queremos atraer a nosotros a las personas
que más nos necesitan y a quienes más recitamos en la vida. Este pedido
recibe una atención natural cuando expresamos al mundo que nos rodea
quiénes somos realmente. Estemos alerta y seamos conscientes de lo que
transmitimos, y recordemos: cuando nos acosen las dudas, actuemos con
dulzura, y transitaremos un programa de encanto y alegría.
MEDITACIÓN 14 - CARTAS A TU ÁNGEL
Para
realzar tu experiencia y ayudar a crear una atmósfera que conduzca a la
comunicación angélica, es conveniente encender una vela o una varilla
de incienso. Necesitarás papel y lápiz. Te conviene hacer la cimentación
antes de comenzar, sobre todo si te sientes atolondrada.
1)
Siéntate cómodamente y dedica unos instantes a concentrarte en tu
respiración, regulándola de modo tal que inhalación y exhalación duren
aproximadamente el mismo tiempo.
2) Ahora vuelve
tu atención hacia adentro y piensa en tu Ángel, tal como lo haces
cuando escribes a tus amigos. Piensa en tus amigos, en su aspecto, y
luego te diriges a ellos teniendo en cuenta su personalidad. De la misma
forma, piensa en tu Ángel y permítete sentir su suave energía.
3)
Fecha tu carta, escribe “Querido Ángel” y deja que fluyan las palabras.
Pide a tu Ángel orientación y/o apoyo y agradécele su ayuda por
anticipado. Luego firma al pie, como lo harías en una carta a un amigo.
4)
Si tienes un altar de meditación o una caja en la que guardes cosas
especiales, puedes guardar la carta allí. Algunos ponen las cartas a sus
Ángeles bajo la almohada. Otros las queman, enviando el mensaje a los
cielos con el humo que se eleva. Tú sabrás qué hacer con la tuya. Y si
no lo sabes, ¡pregunta a tus Ángeles!
MEDITACIÓN 15 - LA PRESENCIA YO SOY
Trata
de registrar lo que está sucediendo en tu interior o exterior; ahora
sabemos que podemos crear nuestra realidad y modificarla a cada momento.
Vamos
a invocar, con la asistencia del Ángel de la Presencia a nuestra
amorosa Presencia Mágica, que habita en el interior de nuestro corazón.
Se visualiza como un foco de luz dorado rosado, que contiene amor, sabiduría y poder.
Luego
de purificar nuestros cuerpos podemos registrar seta dulce, eterna
presencia, que está directamente conectada con la esencia de nuestro
ser.
Conoce el propósito de nuestra existencia y el camino correcto a seguir.
Una
vez que la hayas conectado, pídele que siempre puedas irradiar tu luz a
los demás, que puedas consolar con tu amor a los que necesitan decir
las palabras más sabias, poder concretar las acciones brillantemente.
Siendo el puente perfecto y el canal verdadero para todos los reinos de
la creación.
MEDITACIÓN 16 - LIBERACIÓN POR EL AGUA
Algunos
pensamos mejor en la ducha. El siguiente ejercicio te permite obtener
claridad y limpieza en el cuerpo físico, el mental y el emocional.
Si
no puedes recurrir a una verdadera ducha, puedes hacer esta liberación
como visualización. Descubrirás que es sumamente efectiva para trabajar
con sensaciones de ambivalencia, indecisión, pereza, postergaciones, y
falta de concentración. Pero puedes lavar también cualquier otro
problema.
1) Ponte de pie, con la cabeza bajo la ducha, de modo que el agua te rodee por todas partes.
2)
Señala el problema del que quieres liberarte y experiméntalo dentro de
ti. Siéntelo a tu alrededor, en el campo de energía que rodea tu cuerpo.
3)
Mientras el agua cae a tu alrededor, siente cómo se lleva lo que deseas
liberar. Usa las manos para escurrir el problema e imagina que se va
por el desagüe.
4) Recuerda agradecer al problema las lecciones que te ha enseñado y a los Ángeles del agua el haber ayudado a limpiar tu ser.
5) Disfruta del resto de la ducha
6)
Hay quienes utilizan este ejercicio todas las mañanas cuando se duchan,
con el fin de preparase para la jornada. El mismo ayuda a enfrentar con
armonía el trabajo que se tiene por delante, aún si la noche anterior
se estuvo de fiesta y se acostó tarde.
MEDITACIÓN 17 - RECREOS DE HUMOR
Este
ejercicio nos ayudará a desarrollar un sistema para sanar con humor el
estado mental y a genera un plan de mantenimiento para lograr estar
centrados.
Aquí en la tierra prevalece la
gravedad, y son incontables las ocasiones en que cargamos con más peso
del que podemos llevar. La filosofía básica de esta práctica es
aligerarnos y liberarnos de la gravedad mental. Para tener una salud
mental completa debemos mirarnos con honestidad cien veces al día. Con
los Ángeles a nuestro lado podremos ver el humor de las situaciones, y
con cada mirada honesta a nosotros mismos podremos reírnos mucho; la
seriedad y la gravedad se desvanecen con naturalidad.
Cada
vez que nos sea posible tomémonos un recreo para reírnos de nosotros
mismos. Observemos el potencial humano de cualquier situación que
estemos viviendo. La mejor comedia es la vida real, en especial cuando
uno se ocupa de sus cosas y comienza a tomarse a sí mismo con demasiada
seriedad. El orgullo da lugar a una gran cantidad de situaciones
humorísticas; entonces, en cuanto logremos distinguir signos de orgullo,
en nosotros mismos o en otros, observemos el humor que ello genera.
Tomarse
un recreo para aligerarse y reírse ayuda a que uno pueda mantenerse
centrado y fiel a sí mismo. El humor puede cambiar la percepción en un
instante. La capacidad de ver el humor en las experiencias cotidianas
resulta muy importante para combatir el estrés.
El
humor nos afecta a todos de diferente manera. Esto se descubre cuando
intentamos contarle a alguien algo gracioso que nos ocurrió y empezamos a
reírnos tanto que apenas podemos finalizar el relato, entonces la otra
persona nos mira con cierto asombro. Luego, cuando por fin logramos
contar todo, la otra persona se ríe más por nuestra actitud que por el
relato.
Si no podemos encontrar un amigo con
quien reír, podemos reírnos con los Ángeles. ¿A quién le importa que
otros nos vean riéndonos solos? Eso es en sí mismo gracioso. Vamos a
darnos un festín de risas.
La manera más fácil
de incorporar humor a la vida es pedirles a los Ángeles que nos lo
proporcionen. Tenemos que declarar frente a ellos que estamos hartos y
aburridos de la seriedad de la vida y que estamos listos y dispuestos
para aceptar más humor. Cuando nos despertemos por las mañanas vamos a
proclamar el hecho de que ese día reiremos y tendremos muchos buenos
momentos, y que los Ángeles guardianes nos ayudarán a conseguirlo.
Vamos
a desarrollar nuestro propio plan de mantenimiento para mantener la
mano abierta a las experiencias absurdas y ridículas de la vida.
Para
que el sentimiento de orgullo deje de abrumarnos, bastará con que nos
relajemos y riamos mucho y que nos ridiculicemos a nosotros mismos.
Cuando ocurra algo inesperado que nos descoloque un poco, tendremos que
aprender a hacer una pausa para retomar el aliento, y buscar el lado
humorístico de la situación.
Si cada vez que
resulte posible nos miramos a nosotros mismos con honestidad pero con
amor y humor, seguramente viviremos mucho tiempo más. Recordemos
divertirnos al menos un poquito por día; contamos con la ayuda y el
apoyo absoluto de los Ángeles.
MEDITACIÓN 18 - LA LUZ
Hoy vamos a intensificar la luz que llevamos en nuestro interior para que brille con su real luminosidad.
Vamos
a hacer una verificación física, comenzando por los pies: ¿En qué
posición están, y qué hacen? Vamos a moverlos de un lado a otro, y vamos
a permitir que la luz los abrace. ¿Y las piernas? ¿Están estiradas o
encogidas? ¿Están cómodas? Permitamos que la luz penetre en las piernas
para sentir que abre canales de flexibilidad que mantienen viva la luz.
¿Las manos están cómodas y sueltas, o tensas mientas sostienen esta
hoja? ¿Los brazos están pesados, livianos, doblados? Incorporemos la luz
y visualicemos los brazos como alas de luz, listas a volar en cualquier
momento. Ahora dirijamos la concentración a nuestro centro, la zona del
cuerpo donde los órganos realizan experimentos químicos y el corazón
bombea la energía de la sangre al resto del cuerpo. Ahora inspiremos
profundamente y aflojemos todos los músculos del estómago. Aflojemos la
espalda, hagamos contorsiones y empujemos como si fuéramos pollitos que
tratan de salir del cascarón. Ahora otra inspiración más, pero esta vez
de luz pura.
Ahora viene la parte difícil. Vamos
a relajar la mente, que muy probablemente sentimos alojada en la
cabeza. Relajamos los músculos del cuellos, los estiramos suavemente y
sentimos que el cuello desaparece. Ahora la cabeza queda colgando en el
espacio. ¿Qué vemos, oímos, olemos y percibimos por el gusto? Relajemos
los músculos del rostro. Dejemos que la mente vuele libremente por un
instante y luego pongámosla en foco para hacer algunas comprobaciones
del estado actual de conciencia.
¿Cómo actuamos?
¿Cuál es el tono que prevalece en nuestra vida últimamente? ¿Estamos
actuando como adultos plagados de responsabilidades que nadie puede
comprender ni ayudarnos a superar? Si es así, recordemos que somos hijos
de la luz; conforme aprendamos a jugar con el fluir divino de la vida,
las responsabilidades cambian y se convierten en juegos.
Comencemos
a imaginar la forma en que las pequeñas insatisfacciones se proyectan
en nuestra vida. Si estamos preocupados por algo, tomemos conciencia de
que la preocupación no es un problema para los hijos de la luz; entonces
vamos a entregarla a los Ángeles. Si nos sentimos con poca energía,
vamos a pedirles a los Ángeles que nos ayuden a redescubrir la energía
del hijo de la luz. Tristeza o depresión significan que la luz se va
opacando y que el adulto que hay en nosotros decidió apagarla para dejar
de sentir dolor. Seamos hijos de la luz y retomemos la conexión con la
alegría de la niñez iluminada. Volvamos a encender la luz y dejemos que
brille intensamente. ¡Los Ángeles están para ayudarnos! Pidámosles
alegría para reemplazar la tristeza.
¿Somos
felices? Tenemos que saber en nuestro interior que esa felicidad no se
debe a ese nuevo juguete maravilloso que tenemos o al fantástico puesto
de trabajo que conseguimos ni a la hermosa relación que tenemos con otra
persona. La felicidad que sentimos se debe a que nos amamos a nosotros
mismos y a que permitimos que nos sucedan cosas agradables. Si las
circunstancias cambiaran, no dejaríamos de ser felices. Ya que la
felicidad viene desde el interior y todos los hijos de la luz sabemos
cómo tener unicidad con la esencia de la felicidad.
¿Somos
amigables? ¿Permitimos que los demás entren y salgan de nuestra vida?
Un hijo de la luz es amigable y atrae personas amigables y mágicas. Las
preguntas anteriores son sólo algunas de las que podemos hacernos y
pueden permitirnos un muy buen esclarecimiento interior sobre zonas de
la vida en las que quisiéramos que la luz fuera más intensa.
Este
ejercicio no tiene como objetivo que se lo tome con demasiada seriedad.
Es tan sólo una forma de comprobación para que concentremos la atención
en el hecho de que somos hijos de la Luz. No siempre recordamos que
somos hijos de la luz y que tenemos un padre que nos nutre – el poder
superior del universo que por siempre nos ama, que los Ángeles mantienen
y personalizan para nosotros – que puede encargarse de los problemas
que no son realmente nuestros. Lo único que necesitamos hacer es
recordar que podemos entregar nuestros problemas de adultos a fin de que
sean resueltos para el mayor bienestar del universo, soltarnos y
dejárselos a los Ángeles.
MEDITACIÓN 19 - LIBERACIÓN POR LA TIERRA
A
medida que practiques los ejercicios de cimentación y vayas conociendo
tus chakras, puedes querer aclarar un problema específico que
corresponda a tu centro de energía en especial. Por ejemplo, los
problemas de seguridad se relacionan con el chakra de la raíz; las
desilusiones amorosas se relacionan con el chakra del corazón, etc. si
no estás segura de cuál es el chakra involucrado, puedes cubrir todas
las bases liberando el bloqueo de todos los centros. Una solución más
rápida es liberar desde el corazón y luego desde el chakra de la raíz.
El
ejercicio que te doy a continuación amplía el esquema del ejercicio
Básico de Liberación; te permite profundizar más en el cuerpo sutil,
para que puedas llegar al sitio donde están almacenados estos bloqueos.
Puedes pasar por todos tus chakras en una sesión o trabajar con uno
solo.
Para despejar un bloqueo de un solo
chakra, puedes pasar directamente allí después de cimentarte en tu
chakra de la raíz. Este ejercicio es especialmente efectivo para liberar
miedos, dudas, desilusiones y sensaciones de poco valer, ineptitud y
autocrítica.
1) Relájate y cierra los ojos.
Invita a tu Ángel a estar contigo. Concéntrate en la respiración, en
tanto envías tus raíces a la tierra. Cuando hayas penetrado y estén
afirmadas, comienza a extraer por tus raíces la energía de la tierra,
llevándola a cada uno de tus chakras, uno a uno.
2)
Imagina finas hierbas o filamentos que surgen del chakra de la
coronilla, alargándose al cielo y conectándote con Él. Aspira la energía
de los cielos por medio de estas fibras, llevándolas a todas tus
chakras, uno a uno. Vuelve a concentrarte en el chakra de la raíz.
3)
Fíjate si hay allí emociones, recuerdos o bloqueos que necesites
liberar. En ese caso, concéntrate en cada uno de ellos, sucesivamente.
Averigua de dónde han venido y pregúntate qué te han enseñado.
4)
Cuando estés lista para liberar, agradece al recuerdo o bloqueo lo que
hayas aprendido. Inhala profundamente y exhala el bloque con fuerza, por
la boca, con un sonido sibilante. Siente cómo viaja por tus raíces
hasta la tierra, a medida que exhalas. Repite dos veces más.
5)
Cuando estés lista, aspira hondo, lleva la energía de la tierra a tu
chakra sexual y repite los pasos 3 y 4. Continúa avanzando por los
chakras, uno a uno, explorando y liberando.
6)
Agradece a tus Ángeles y a nuestra madre, la Tierra, por trabajar
contigo. Presta atención a tu cuerpo físico. Repara en tu respiración. Y
cuando estés lista, abre los ojos.
Tal vez
descubras que este ejercicio de Liberación por la Tierra ofrece una
bonificación: te deja más cimentada, más centrada y estable.
MEDITACIÓN 20 - LIMPIEZA Y LIBERACIÓN RÁPIDAS
El
ejercicio básico de Liberación es una herramienta importante, pero
habrá ocasiones en que no tengas tiempo de realizar todo el proceso.
Tras haber practicado la técnica básica, ahora podrás utilizar una
versión más abreviada, que es la siguiente:
Este
ejercicio resulta útil cuando tienes poco tiempo o quieras liberar una
sola cosa. En caso de emergencia, puedes hacerlo de pie, pero es mejor
sentarse, con los pies bien apoyados en el suelo. Es especialmente
adecuado para liberar la resistencia, los obstáculos, la fatiga y las
vibraciones ajenas.
Antes de comenzar, pide ayuda a tu Ángel.
1) Con los pies bien apoyados en el suelo, inhala profundamente. En tu primera exhalación, envía las raíces hacia la tierra.
2)
Cuando vuelvas a inhalar, siente en el cuerpo lo que quieras liberar.
Al exhalar, visualízalo y siente cómo se dispara por tus raíces, bien
hacia la tierra. Continúa exhalando durante tanto tiempo como puedas,
hasta que hayas expelido todo el aire de tus pulmones.
3)
Cuando tomes el aliento siguiente, lleva los ojos hacia arriba, como si
miraras hacia lo alto de tu cabeza. Inhala tan profundamente como
puedas.
4) Cuando exhales, envía los filamentos desde la coronilla de tu cabeza hacia los cielos, a gran velocidad.
5)
Al inhalar, visualiza la luz solar de los cielos que se vierte hacia tu
coronilla. Deja que te llene el cuerpo y fluya por tus raíces hacia el
centro de la Tierra, con tu cuarta exhalación.
6)
Repite los ciclos de respiración dos veces más, hasta un total de tres,
pidiendo ayuda a tus Ángeles. Cuando hayas terminado agradece a los
ángeles y a la tierra.
MEDITACIÓN 21 - CURAR UNA RELACIÓN
Para
esta visualización necesitas dos velas y un ambiente tranquilo y
retirado. Cuida de tener a mano tu cuaderno y una birome, por si quieres
anotar lo que recibas.
1) Enciende dos velas.
Una te representa a ti; la otra a la persona cuya relación contigo
deseas curar. Al encender las velas di: “Invoco a mi Ángel para que me
asista en esta curación. Invoco al Ángel de … (agrega el nombre de la
persona) para que asista en esta curación. Invoco la presencia de
nuestro Ángel vinculante.
2) Cuando ambas velas
estén encendidas, di: “Pongo bajo la luz este momento, esta curación y
esta relación”. Aspira y, al exhalar, visualiza la ceremonia de curación
como si se produjera también en tu corazón.
3) Visualiza a la otra persona. Mírala como es realmente; buena, mala, divertida, triste, tal como la conoces.
4)
Cuando hayas repasado las múltiples facetas de la otra persona, pide
una impresión de su Ángel. Cierra los ojos y deja que esa impresión
crezca.
5) Invita a ese Ángel a compartir
contigo y con tu Ángel lo que se debe hacer para curar la relación.
Escucha la respuesta de Ángel y siéntela también. Quizás recibas
impresiones de luz, color o imágenes, además de oír palabras. Permanece
abierto a las impresiones que recibas y no rechaces nada, aunque te
parezca tonto.
6) Cuando las impresiones se
esfumen, da las gracias al Ángel de la otra persona. Luego ábrete a las
respuestas de tu propio Ángel. Pregunta: “¿qué se debe hacer para curar
la relación?” una vez más ábrete para recibir lo que venga sin juzgar.
7) Cuando hayas recibido el mensaje de tu propio Ángel, pregunta el Ángel de la Vinculación si hay algo más que debas saber.
8)
Agradece a los Ángeles e imagina un hermoso regalo que contenga las
impresiones y sugerencias que acabas de recibir. Imagínate entregando
ese regalo a la otra persona.
MEDITACIÓN 22 - EL PARAGUAS ANGELICAL
Cuando
quieras a tu Ángel especialmente cerca de ti durante todo el día, abre
tu Paraguas Angelical. Esta visualización se puede utilizar cuando
tienen en la mente un objetivo en particular, como un examen o una
entrevista importante, y deseas permanecer centrada y serena. O cuando
necesitas el consuelo de tener junto a ti a un amigo querido.
1)
De cara al Este, extiende tus brazos hacia fuera y di: “Permanece
conmigo, Ángel”. Cierra los ojos un momento e imagina a tu Ángel de pie
detrás de ti; sus alas comienzan a envolverte. Repite esta invocación de
cara al Sur, al Oeste y al Norte. Observa si al hacerlo detectas en tu
cuerpo o en la atmósfera alguna sensación especial.
2)
Cuando hayas completado la invocación hacia los cuatro puntos
cardinales, siéntate y levanta los brazos, con la palma de las manos
hacia arriba. Imagina a tu Ángel de pie a tu espalda, sosteniendo un
paraguas grande con varillas hechas de oro. Aunque no hay tela que cubra
el armazón del paraguas, las varillas están conectadas por gotas de luz
dorada, de modo que te encuentras bajo algo parecido a una gigantesca
telaraña dorada, salpicada de rocío celestial.
3)
A través de esta red de luz caen unas gotas de luz blanca y dorada, que
te rodean y te envuelven. Mueve los brazos para sentir con más potencia
los efectos de este paraguas. Mientras lo haces, di: “Mi Ángel está
conmigo”. Repite esto tantas veces como lo desees.
4)
Cuando te levantes, percibe el campo de energía creado por ese paraguas
especial. Imagínalo suspendido por encima de ti a medida que transcurra
el resto de tu día.
En cualquier momento,
durante la jornada, puedes decir: “Acompáñame Ángel”, y visualizar
nuevamente le Paraguas Angelical. A diferencia de los paraguas comunes, a
éste no puedes dejarlo olvidado en el autobús o en el cine.
MEDITACIÓN 23 - MEDITACIÓN CENTRALIZADORA
Pasamos
mucho tiempo dentro de la mente, de la cabeza. Pero esta meditación
llevará la conciencia a tu mismo corazón, el centro de tu cuerpo, que es
el sitio donde tus Ángeles se encuentran contigo.
Lo
único que necesitas es un sitio donde puedas estar en silencio y sin
perturbaciones. Lee varias veces los pasos antes de comenzar.
1)
Cierra los ojos. Siente cómo sube y baja tu aliento en el cuerpo.
Mantén el pensamiento de que, cuando respiras, Dios te está dando
aliento.
2) Pon las manos sobre el corazón.
Siente el latir del corazón, la fuerza vital. Siente cómo bombea sangre a
todos los rincones de tu cuerpo.
3) Mantén la
atención centrada en el corazón y su latido. Si tu mente se distrae,
devuélvela a tu corazón, al centro de tu naturaleza sensible.
4)
Imagina una luz o llama en el centro de tu corazón. Representa la
chispa de lo Divino dentro de ti. Es la semilla de quien eres. De la
manera que puedas, conéctate con esa chispa y siente lo que significa
para ti.
5) Exhala a fondo. Cuando estés lista, vuelve a abrir los ojos.
Este
ejercicio puede inundarte con una gran sensación de calma, de
percepción de tu Yo Superior. Puedes utilizarlo a cualquier hora del
día, dondequiera que estés, cuando no te sientas centrada. Como sólo
lleva un minuto, puedes hacerlo en tu escritorio, o ante el volante de
tu auto cuanto te detenga un semáforo en rojo. La vida que llevamos es
mucho más complicada que la de nuestros abuelos. Bienvenido sea
cualquier herramienta que nos permita permanecer centrados.
Cuando
pensamos en Ángeles, con frecuencia pensamos en coros celestiales, en
Ángeles con carpas y trompetas. Cuando entramos en alineación con
nuestros acompañantes, nos abrimos a esa música gloriosa, que tanto se
oye como se siente.
MEDITACIÓN 24 - AUDICIÓN EXPANDIDA
Para
oír la voz de tu Ángel también debes poder escuchar. El ejercicio
siguiente está ideado para extender tu capacidad de escuchar y acentuar
tu facultad de clariaudiencia, que está sobornada por el chakra de la
garganta, el centro energético de comunicaciones de tu cuerpo. Esta
habilidad no tiene nada de misteriosa: es simple extensión natural del
alcance de frecuencia de nuestros sentidos.
Antes
de hacer cualquier ejercicio recuerda que tienes que estar bien
relajada y cimentada; observa si hay algo que necesites liberar antes de
comenzar. En ese caso, dedica algún tiempo para efectuar la liberación.
para anotar. Pon la música y sube el volumen hasta que el sonido rebote
en el cuarto y te rodee. Permítete sentir la música en el cuerpo y
disfruta de las sensaciones agradables o felices que te brinde.
Mientras
disfrutas de la música, imagina que tu Ángel baila al compás de la
melodía, cualquiera que sea la forma en que lo veas. Mantén la imagen de
tu Ángel bailando hasta que acabe la música.
Apaga
el sistema de sonido y elimina cualquier otro ruido mecánico que haya
en el cuarto, tal como relojes, ventiladores o acondicionadores. Luego
prosigue con el ejercicio:
1) Siéntate, cierra
los ojos y escucha el silencio. ¿Qué oyes? Escucha los sonidos que
provienen de fuera: de la calle o de los vecinos. Sintoniza el más
lejano. Sintoniza los más próximos a ti. Siéntelos en tu cuerpo.
2)
Mantén los ojos cerrados. Después de escuchar los sonidos exteriores,
ve hacia adentro. Escucha los silencios entre un sonido y otro, entre
las notas, entre tus oídos. En ese espacio, entre tus oídos y tu
garganta, está el sentido de tu Ángel, la voz de tu guardián y
compañero.
3) Permanece quieto y sigue
escuchando, siempre con los ojos cerrados. Imagina que tu Ángel está
sentado, o de pie, a tu lado. Tal vez no percibas palabras, pero si lo
haces toma tu cuaderno y anótalas. Si no, quizás veas colores o líneas
enredadas. Deja que las imágenes se traduzcan a sonidos en el oído de tu
mente.
4) Cuando sientas que los sonidos y el silencio se han convertido en parte de ti, abre suavemente los ojos.
Es
posible que durante este ejercicio, tu Ángel te busque. Lo sabrás por
el mensaje que recibas, mediante sensaciones, imágenes y hasta palabras.
Pero aunque no recibas ningún mensaje, el ejercicio te pondrá en un
nuevo sitio de atención receptiva. Durante la mayor parte del tiempo
estamos ocupados charlando o pensando en lo que vamos a decir, que no
nos permitimos los placeres del silencio, de escuchar los diferentes
tipos de sonidos que viven en ese silencio. Es en el silencio donde nos
hablan los Ángeles.
MEDITACIÓN 25 - PREGUNTA A TUS ÁNGELES
Lee
el ejercicio varias veces y antes de hacerlo haz primero el de
cimentación, liberación y alineamiento. Omitirlos es como omitir el
precalentamiento cuando vas a correr. Cuanto más te estires, mejor
correrás.. o volarás, en este caso. Para hacer este proceso, necesitarás
tu diario angelical, estilográfica.
1)
Cómodamente sentado en tu lugar sagrado, siente la presencia de tu Ángel
y comienza a inhalar todo su amor. Saluda a tu Ángel con el corazón y
recibe su saludo.
2) Deja que en tu mente se
forme una pregunta. Ponla en tu corazón. Cuando puedas sentir las
palabras en el corazón, abre los ojos, anótala y formúlala a tu Ángel.
3) En el silencio, ábrete a las palabras que vengan a ti de tu Ángel. Anótalas sin pensar en ellas.
4)
Como en cualquier conversación, tendrás cosas que decir en respuesta a
lo que tu Ángel te ha expresado. Anota esas palabras mientras las emites
a tu Ángel.
5) Una vez más, recibe la respuesta que te dé tu Ángel y anota las palabras.
6) Continúa hasta que hayas llegado al final de la conversación.
7) Da las gracias a tu ángel
Presta
atención a tu cuerpo, a tu respiración, a lo que te rodea. Lee lo que
recibiste. ¿Qué te enseñó sobre ti misma? ¿Qué sensaciones te inspira?
Si no crees que la información sea correcta o útil, si te parece que
todo es invento tuyo, guárdala. Vuelve a leerla más adelante, quizás
después de una o dos semanas. El tiempo te dará distancia suficiente
para evaluar sus méritos con una actitud menos crítica.
Cuando
tu Ángel habla, puede sacudir algunas de tus creencias más antiguas y
arraigadas. Cualesquiera que sean los motivos, los humanos nos aferramos
mucho a nuestras creencias y estamos convencido de que son acertadas.
Los
momentos íntimos con tu Ángel son una honda fuente de placer. Tu
ayudante celestial trate a tu vida consuelo y alegría, así como
iluminación para enfrentar temas problemáticos. En este momento estás
disfrutando de tu primer contacto con tu Ángel. ¡Felicitaciones! Y te
esperan nuevas diversiones.
MEDITACIÓN 26 - SINTONIZAR TUS ANGELES COMUNICANTES
Si
tu socio, amante, amigo, colega o compañero de clase está en contacto
con los Ángeles, podéis hacer juntos este ejercicio. De lo contrario,
siéntate en silencio e imagina a la otra persona contigo. Comienza con
la Meditación Básica de Cimentación y pasa a lo siguiente:
1) Cierra los ojos. Siente que tu Ángel Guardián sentado detrás de ti. Presta atención a su energía o vibración particular.
2) Siente al Ángel Guardián de la otra persona. Visualízalo sentado detrás de ella, esté o no físicamente presente.
3)
Cuando percibas al otro Ángel, invoca la presencia del Ángel vinculante
de la relación. Con frecuencia esta energía se presentará como una gran
esfera que os rodea, a ti, al otro y a ambos Ángeles. También puedes
percibirla como otro ser, sentado entre vosotros dos, y ligándoos a
ambos.
4) Sintoniza al Ángel de la Vinculación y
deja que crezca tu captación de su presencia. ¿De qué modo difiere de
la de tu Ángel guardián? ¿Cómo es? Mientas exploras la nueva presencia,
recuerda que está contigo pro el vínculo que te conecta a la otra
persona. Lleva consigo la energía de lo más amante y armonioso que
exista entre vosotros.
5) Así como aprendiste a
dialogar a con tu Ángel personal, ábrete ahora al ángel de la
vinculación, recibe su energía y escucha sus palabras. Formúlale
cualquier pregunta, exprésale todas las dudas o necesidades que puedas
tener. Debes estar abierta para recibir su consejo y su sabiduría: en
palabras, imágenes, colores o sensaciones, en cualquier otra forma que
puedan presentarse.
6) Si estás haciendo esto
con la otra persona, compartid mutuamente vuestras experiencias del
encuentro con el Ángel de Vinculación. Esto ayudará para que vuestra
vinculación sea más sólida.
7) Si lo estás
haciendo sola, visualiza al otro y sabe que el Ángel de Vinculación
tocará suavemente a esa persona mediante su guardián. Sabe también que
tu búsqueda ya ha comenzado a marcar una diferencia.
8)
Cuando hayas terminado, agradece al Ángel de la Vinculación, a los dos
ángeles de la Guardia y también a tu amigo. Una vez más, concéntrate en
tu respiración. Cuando estés lista, abre los ojos.
MEDITACIÓN 27 - ALIVIO DEL DOLOR
Para
evitar el sufrimiento y el dolor los seres humanos hacemos cosas
inteligentes y otras que no lo son tanto. No resulta difícil comprender
por qué queremos evitar sensaciones de dolor y frustración. La pena, la
angustia, la soledad, la culpa, el rechazo, el temor, el remordimiento y
el odio no son experiencias divertidas. A fin de evitarlas, muchos de
nosotros las aplazamos y las ignoramos, con la esperanza de que todo se
resuelva sin ningún esfuerzo de nuestra parte. Tomamos medicinas para
eliminar el dolor; nos rodeamos de mucho por hacer para no tener tiempo
de enfrentar el dolor; caemos en depresiones profundas y vivimos en
mundos de fantasía del pasado o del futuro.
Todas
estas defensas contra el dolor impiden que experimentemos la vida en el
presente. Has escuchado hablar de la importancia de vivir en el
presente, pero esta simple verdad suena a repetición puesto que el
presente es el único momento que tenemos. Quizás has escuchado decir que
los peores problemas son aquellos que nunca suceden; en otras palabras,
que sólo existen en nuestra imaginación. Dedicamos un valioso espacio
de la imaginación a preocuparnos por cosas que nunca sucederán. Las
experiencias desagradables de la vida no serían tan malas si las
conjugáramos en presente. Vivir plenamente el presente puede resultar
fascinante; todo depende de la actitud que tomemos hacia la vida. La
sociedad en que vivimos se inclina por liberarse del dolor; buscamos
alivio inmediato, cuanto más inmediato mejor.
Si
tenemos un leve dolor de cabeza, un anuncio publicitario en la
televisión nos recuerda que tenemos que tomar una aspirina para
liberarnos del dolor. Estamos tan convencidos de que el dolor es algo
malo que, cuando sufrimos cualquier tipo de dolor, nos sentimos
fracasados. El hecho de utilizar nuestro propio dolor como una lección o
como un punto de inflexión positivo en la vida puede hacer de ese dolor
la lección más valiosa que jamás hayamos imaginado, y que nos llevará a
la grandeza.
El Dr. Bernie Siegel se refiere
al dolor y al sufrimiento como “la tecla para reemplazar a Dios”, un
mensaje que nos lleva a repensar nuestro camino, quizás a cambiar de
carácter y de destino, y a “encontrar el modo especial en que cada uno
puede contribuir con amor al mundo”.
Si existe
el dolor en nuestra vida y en nuestro cuerpo vamos a pedirles a los
ángeles que nos ayuden a comprender el significado superior que ello
tiene para el camino de la vida. Les pedimos que nos conduzcan hacia la
verdadera fuente de dolor y que nos ofrezcan guías de cómo aliviarlo de
manera natural y para nuestro mayor bienestar.
Si
hay alguna situación que resulte demasiado difícil de enfrentar con
honestidad, es decir, si hay algo en la vida que todavía no estamos
dispuestos a enfrentar porque nos sentimos solos, debemos saber que no
estamos solos. Los Ángeles están allí junto a nosotros; cuando estemos
listos para admitir algo que nos causa dolor, ellos nos admirarán y
recompensarán por haberlo hecho.
Veamos el
dolor desde una nueva perspectiva. ¿Qué es el dolor exactamente, y por
qué es tan horrible? ¿Por qué resulta tan difícil ver sufrir a otro ser
humano? ¿Qué haríamos si un ser amado estuviera sufriendo una enfermedad
terminas y nos pidiera que lo ayudáramos a morir? ¿Por qué el suicidio
genera tanta angustia a los que se quedan? ¿Significan algo estas
preguntas? ¿O sería mejor evitarlas?
Pregunto
todo esto porque muchas veces asumimos el dolor de otra persona y
terminamos juzgándolo desde nuestro punto de vista. Quizás nos
preguntamos por qué esa persona no se dedica a recuperarse y a vivir.
Cuando experimentemos dolor, vamos a hacernos acompañar por un Ángel y
no por un destructor del dolor. Mediante el diario vamos a preguntarnos:
¿Estoy evitando una supuesta situación de dolor? ¿Estuve tolerando una
forma degradada de dolor para evitar un arrebato de dolor más intenso?
Vamos a formular un pedido y enviarlo a los Ángeles afirmando que
estamos dispuestos a mirar abiertamente la razón del dolor que sufrimos.
Y luego recibamos la ayuda desde lo alto.
MEDITACIÓN 28 - LA CULPA
¿Realmente
te has detenido alguna vez a pensar en la palabra culpa? Culpa
significa responsabilidad por un error y crítica por hacer mal. La culpa
es un peso pesado con el que nos rodeamos cuando no podemos cambiar el
pasado que nos acecha. Si nos culpamos por algo que sucedió en el pasado
vamos a comenzar a permitir que surja en nuestra vida una
predisposición al perdón y al olvido. Quedarse aferrado al pasado nos
impide seguir adelante en el camino hacia una vida feliz y espiritual.
El pasado sólo permanece vivo en la mente, y quizás ni siquiera tengamos
un recuerdo exacto de lo que sucedió.
Vamos a
tomar una hoja de papel, convocamos a los Ángeles y hacemos una lista de
todos los asuntos inconclusos. Los Ángeles querrán que comencemos a
darles un tono más leve a las percepciones sobre el pasado, por lo que
tendremos que empezar a pensar en el humor. Probablemente algunos
recuerdos del pasado no sean para nada graciosos, pero puedo asegurarle
que pueden perder mucho del peso con que nos agobian la vida. El humor
sana, y los Ángeles lo utilizan con mucha frecuencia.
Entonces,
después de hacer una lista de las personas con las que tenemos asuntos
inconclusos, debido a nuestra testarudez o a la de ellas, busquemos el
humor. Los Ángeles nos ayudarán. Te garantizo que si se trata de una
situación seria, relacionada con el falso orgullo, no le faltará humor.
Cuando nos sucede algo doloroso, busquemos el crecimiento. Lo doloroso
puede ser el mayor acelerador del crecimiento que se conozca. En este
punto, después de haber hecho la lista, la idea principal de los Ángeles
es que cultivemos el estar dispuestos a alivianar y prepararnos para
liberar el pasado, cambiando la percepción que tenemos sobre él. La
esencia de esta práctica consiste en la predisposición a tomarnos con
más liviandad liberando los dolores y las equivocaciones del pasado.
MEDITACIÓN 29 - JARDÍN MENTAL
Una
forma de incorporar programas positivos consiste en visualizar la vida
como un jardín. Hay vidas tan hermosas como los jardines ingleses,
combinados todos los colores como una pintura impresionista. Otros
jardines de vida pueden estar llenos de flores silvestres, con árboles
altos que representan la fuerza en una zona. Otros pueden estar muy bien
arreglados y en un perfecto orden, lo que no invita a que los niños
jueguen en él ni a que alguien arranque una flor. Lamentablemente, hay
vidas que parecen jardines desarreglados, con malezas, plantas secas y
árboles caídos; pero ni siquiera en este caso conviene desesperarse,
puesto que un jardín siempre tiene la posibilidad de ser vuelto a
plantar y desmalezar.
Pensemos en nuestro
propio jardín. Si nos parece bien, podemos tomar una hoja de papel y
dibujarlo. Utilicemos la imaginación y pasemos un buen momento. Los
proyectos nuevos pueden aparecer como retoños; un árbol puede
representar la familia propia, un rosal, el amor y el romance; las viñas
florecidas pueden ser los amigos y así sucesivamente.
Ahora
después de haber visualizado claramente el jardín mental, vamos a
convertirnos en jardineros y a observar qué hace falta hacer. Quizás hay
una zona que creció en exceso y precisa un recorte, o hay maleas que
hace falta eliminar para poder sembrar nuevas semillas. Si el jardín
luce bien, vamos a pensar en cuáles son las zonas que quisiéramos
cosechar. Pensemos en cómo fomentar el crecimiento saludable
(fertilizantes), y guardémoslo en la memoria. Pensemos en cuáles son los
frutos de lustra labor que pueden estar listos para ser cosechados. Si
el jardín creció en exceso y parece fuera de control, vamos a tener que
desmalezar y cultivar. Cualquiera sea el estado del jardín, vamos a
dejar espacio para plantar semillas nuevas y lugar donde los Ángeles
pueden jugar. Quizás ellos quieran presentarnos una nueva variedad de
flores o frutas, pero necesitan el espacio.
Ahora
vamos a hacer una relajación profunda y vamos a visualizar el jardín
mental. Pensemos en las semillas que quisiéramos sembrar y visualicemos
cómo serán cuando crezcan y florezcan. Vamos a limpiar un espacio para
permitir que los Ángeles ingresen a nuestra mente y siembren la semilla.
Les pedimos a los Ángeles que cuiden los retoños y que les permitan
crecer con fuerza y salud. Les pedimos también que nos esclarezcan sobre
la forma de hacer que el jardín crezca. Les preguntamos si hay semillas
escondidas, o si una semilla puede llegar a convertirse en una hermosa
flor silvestre. ¿Hay ramas en el camino? ¿Hay plantas que se superponen
entre sí? Después de haber visualizado y disfrutado del jardín durante
un rato, nos quedaos en estado de relajación y tranquilizamos la mente.
Ahora
vamos a pedirles a los Ángeles algunos pensamientos simiente. Los
pensamientos simiente son ideas que podemos seleccionar para que crezcan
en el futuro, y precisan tiempo para germinar en nuestra mente mediante
la meditación. Un pensamiento simiente puede significar el comienzo de
un proyecto importante que iniciaremos en algún momento de la vida, o
puede ser una idea con la que juguemos en las meditaciones durante años
hasta que se desarrolla y toma la forma de una convicción o un concepto.
Recordemos que somos los jardineros, y que, con los Ángeles de
compañía, podemos hacer que nuestro jardín sea tan grande y hermoso como
lo soñamos.
MEDITACIÓN 30 - LA SONRISA
Así
como un recuerdo en las células puede disparara sentimientos negativos,
un recuerdo también puede ser el disparador de sentimientos positivos.
La sonrisa es un ejemplo de ello. Sonreímos naturalmente cuando nos
sentimos felices o cuando estamos a punto de reír, de modo que se estima
que el hecho de colocar la boca en posición de sonrisa dispara una
respuesta feliz.
Vamos a utilizar la sonrisa
como un borrador de pensamientos negativos. Cuando surja uno de esos
pensamientos, lo haremos desaparecer con una sonrisa. Permitámonos
sentir el proceso de la sonrisa que borra los sentimientos negativos de
la mente, o visualicemos la sonrisa como un chorro de agua que limpia lo
negativo. Puedes imaginar también la sonrisa como una luz hermosa que
brilla a través del rostro. Cuando una persona sonríe, parece hermosa
independientemente de sus rasgos físicos; los Ángeles promueven la
belleza y en la tierra y adoran una buena sonrisa.
Al
sonreír atraemos la energía angélica. Sé que hay momentos en los que no
tenemos ganas de sonreír y no soporto que alguien me pida que sonría
sin tener en cuenta el resto de los elementos de la situación. Pero uno
puede pedirse a sí mismo sonreír incluso aunque no tenga ganas de
hacerlo, y el simple hecho de sonreír puede hacernos cambiar de ánimo y
de actitud. En otras palabras, conviene sonreír siempre porque la
sonrisa atrae a los Ángeles, que nos ayudarán a borrar lo negativo y a
transformar la percepción en positiva.
Cuando
no sonreímos ni tenemos ganas de hacerlo, tratemos de identificar la
razón. Vamos a mirarnos al espejo y a notar qué nos dice nuestra
expresión. Tal vez estemos cansados y tengamos una expresión vaga,
apática. O tal vez estemos preocupados por algo y tengamos una expresión
angustiada y atormentada. ¿Nos vemos tristes e infelices? ¿Enojados?
¿Egoístas? ¿Perplejos? Vamos a observarnos sin juzgar, rastreando la
expresión hasta su origen, y luego comencemos a sonreír.
No
importa si la sonrisa es genuina o no; simplemente sonriamos. Y si se
trata de alguien que sonríe todo el tiempo, incluso cuando se siente
mal, que no cambie; que observe qué significa eso, sin juzgarse de
manera negativa. Conviene recordar algunas cosas respecto de la sonrisa:
es difícil ser rudo o egoísta con alguien que sonríe, así que si
sonreímos más el resto del mundo nos tratará mejor. La sonrisa atrae a
los Ángeles; entonces, si sentimos miedo en una situación la sonrisa nos
brindará más protección. La sonrisa se facilita con la práctica. Cuando
nos invada una sonrisa plena, la felicidad y la paz de los Ángeles nos
rodearán y nos abarcará.
MEDITACIÓN 31 - DECLARACIÓN DE CAMBIO
La
palabra escrita tiene un poder propio, en especial cuando los Ángeles
participan. Entonces, cuando necesitemos ayuda para cambiar un esquema
de pensamiento o una mala costumbre, sacamos una hoja de papel y
comenzamos a escribir. Vamos a hacer una declaración de que estamos
libres de pensamientos negativos, esquemas caducos y mapas antiguos.
Anunciamos finalmente que estamos dispuestos y felices a aceptar el
cambio, y declaramos que los nuevos esquemas con resultados positivos
reemplazan las costumbres negativas y caducas. Podemos hacer esto de la
forma que más nos convenga, pero hagámoslo con creatividad.
Declaremos
todas nuestras falencias, todo el exceso de equipaje, y dispongámonos a
renunciar a ello por el bien del Yo Superior. En el cambio de
perspectiva nos conviene divertirnos e incorporar una dosis de humor. Es
muy gracioso que una persona se ría de sí misma y disfrute de la locura
de la existencia humana. Anunciemos formalmente nuestra fe en los
Ángeles; ellos nos ayudarán a salir en los tiempos difíciles, y por
sobre todo nos ayudarán a ser felices y a aceptar el hecho de que
verdadera-mente merecemos tranquilidad y bienestar. Cada uno de nosotros
es un ser humano maravilloso y valioso, cuya vida es una luz en la
tierra, y los Ángeles quieren que disfrutemos de ello. ¡Vamos adelante!
MEDITACIÓN 32 - INVOCACIÓN
Este
pequeño y sencillo cántico es otra manera de utilizar los sonidos que
hace tu cuerpo para alinearte con los Ángeles. Contiene sólo cuatro
palabras, tres de las cuales se repiten tres veces y una cuarta que se
pronuncia una sola vez al final. Puedes repetir el cántico tantas veces
como quieras. Cada palabra se entona con el mismo sonido. Puedes
utilizar cualquier nota que te parezca adecuada, experimenta hasta
hallar la nota que suene clara y cómoda.
He
aquí las palabras: Eee Nu Rah (Pronúnciese Iii Niu Ra) Eee Nu Rah Eee Nu
Rah Zay (Pronúnciese “sey”, haciendo sonar la s) Cada una de las
palabras tiene un significado: Eee – significa “Todo lo que soy que no
es físico, mi mente y mis emociones” Nu – Significa “Mi Cuerpo Físico”
Rah, – “MI Alma” Zay – En compañía de los Ángeles. Reunidas, las
palabras del cántico dicen: “Traigo todo mi ser, mente, emociones,
cuerpo y alma, juntos en compañía de los Ángeles”. Es una manera rápida y
fácil de invocar a los Ángeles, una manera de decir: “Aquí estoy,
Ángeles, listo para estar con vosotros”. Es sencillo. Da resultado.
Prueba.
MEDITACIÓN 33 - VOCALIZACIÓN
Puedes
utilizar este ejercicio a fin de estimular garganta y oídos, para
alinearte con tu Ángel. Esto te preparará para conversar con Él. También
puedes emplear una canción, un himno o un cántico, siempre que lo
entones con el corazón. La idea es abrirte vocalmente, aflojar tus
cuerdas vocales y liberarte. Practicar en voz alta el sonido de las
vocales es una manera simple y efectiva de hacerlo; para eso no
necesitas nada más que un asiento cómodo y leer unas cuantas veces el
ejercicio.
1) Comienza con el sonido de la
vocal “A”. Emite el sonido primero con los ojos abiertos; luego, con los
ojos cerrados. Observa si hay alguna tensión en tu cara, tu mandíbula o
tu garganta. Si es así, mueve la mandíbula varias veces, de lado a
lado. Luego repite otra vez el sonido “A”, en voz más alta, con los ojos
abiertos y con los ojos cerrados.
2) Emite el
sonido “E”, primero con los ojos abiertos, luego cerrados. Observa
nuevamente si existen tensiones o si el tener los ojos abiertos o
cerrados marca alguna diferencia. Repite nuevamente el sonido “E” de
ambas maneras, en voz más alta.
3) Repite los pasos ya descriptos con el sonido de la “I”
4) Luego emite el sonido de la “O”.
5) Ahora trabaja con el sonido de la “U”. Puedes pronunciarla primero a la española, uh, y luego a la inglesa, iu.
6)
Cuando hayas terminado con las vocales, emite los sonidos siguientes,
haciéndolo con lentitud: AH, OH, UM. Repite estos tres sonidos hasta que
empiecen a fundirse unos con otros y te encuentres emitiendo el sonido
OHM. Puedes hacerlo con los ojos abiertos o cerrados. Siente cómo vibra
el sonido en tu garganta. Observa en qué otro lugar del cuerpo sientes
estos sonidos. ¿Hay resonancia en el Tercer Ojo, en la zona del Timo o
en la del Corazón?
7) Ahora emite las notas que quieras. Déjalas brotar de tu garganta, subiendo y bajando a voluntad.
8)
Continúa entonando esas notas hasta que todo tu cuerpo esté zumbando.
Si lo has hecho con los ojos abiertos, ciérralos al terminar. Si lo
hiciste con los ojos cerrados, ábrelos al terminar. Permanece quieta
algunos minutos, sólo percibiendo tu cuerpo. ¿Cómo sientes el cuerpo
después de este ejercicio? Los ruidos de la habitación, ¿te parecen
ahora diferentes? Puedes hacer también este ejercicio entonando tu
propio nombre.
Prueba diferentes maneras de cantarlo: alto y bajo, rápido o lento, fuerte y suave. ¡Canta hasta que retumben los oídos.
MEDITACIÓN 34 - LIBERACIÓN POR EL FUEGO
El
fuego purifica. Cuando estés “quemada” por algo, puedes utilizar este
ejercicio para combatir el fuego con el fuego. La Liberación por el
Fuego, es un ejercicio de propósitos múltiples. Sin embargo, es
especialmente bueno para desprenderse de rencores, resentimientos,
envidia, celos y cualquier otro problema que se relacione con otras
personas. Para hacerlo necesitarás papel y bolígrafo, fósforos, un
recipiente con agua y un par de pinzas de metal. Y la ayuda de los
Ángeles del fuego.
1) En un trozo de papel en
blanco anota el rasgo o la cualidad que te mantiene ligado con otro, tal
como los celos o la envidia. Usa un trozo de papel aparte para cada
problema. Pliégalo dos veces para no poder ver lo que está escrito en
Él.
2) Mezcla las hojas plegadas y elige una.
3)
Despliega el papel y reflexiona sobre la situación (o situaciones) que
ha provocado el sentimiento anotado. Imagina cómo sería tu vida si no
albergaras esa cualidad. ¿Cómo cambiaría tu relación con esa persona?
Pregúntate si estás dispuesta a liberarte Retuerce el papel hasta formar
una mecha que puedas sujetar con las pinzas. Préndele fuego,
sosteniéndola por encima de cualquier recipiente con agua. Claro que, si
tienes la suerte de contar con un hogar, esa alternativa es excelente.
4)
Pide a los Ángeles del fuego que purifiquen tu mente, tu cuerpo y tus
emociones de ese estado y que te liberen completamente de Él. Deja caer
en el agua el papel quemado.
5) Repite los
pasos 2 a 5 con cada problema que hayas anotado y del que estés
dispuesta a liberarte. Y no olvides agradecer a los ángeles del fuego. A
veces estos problemas llegan muy hondo, y eso significa que pueden
resurgir. Si eso ocurre, dedica tiempo a hacer primero los ejercicios de
Cimentación, Liberación y Alineación. Luego pide a tu Ángel información
sobre los orígenes del problema así como consejo sobre el remedio. Con
frecuencia, lo que tu Ángel tenga que decir será sorprendente, muy
clarificador y muy útil.
Recuerda que los
Ángeles operan de un modo afectuoso, sutil y paciente. Están dispuestos a
tomar las cosas poco a poco, aunque nosotros no lo estemos. Los
problemas antiguos y crónicos requieren su tiempo. Requiere abrirse paso
por capas de defensas que erigimos con el mejor de los motivos: para
protegernos. Podemos confiar en que los Ángeles nos llevarán sólo hasta
donde podamos llegar con cada paso, despejando gradualmente el camino.
Sé paciente contigo misma y con tu amoroso ayudante. En este proceso de
búsqueda de la verdad, puedes descubrir que aparecen habilidades y dones
antes escondidos, para ponerte en contacto con tu poder y tu éxito
personal. Pero también descubrirás impurezas, deshonestidades,
adicciones y miedos. Todo esto surge a la superficie con la finalidad de
ser visto, aceptado y liberado o puesto a servir.
Tu
reacción inicial puede ser correr hacia las montañas o embarcarte hacia
los mares del sur para evitar esas partes de ti que te parecen un
desafío, una amenaza o un bochorno. Ten fe en ti misma y en los Ángeles.
Resiste. Recibe de buen grado todo lo que se presente como parte de tu
crecimiento espiritual y elabóralo con la ayuda de tus devotos Ángeles.
Desprenderte
de tus costumbres y esquemas mentales perjudiciales te ayudará a
construir una buena base de saludable autoestima y te allanará el camino
hacia comunicaciones aún más claras con tus Ángeles. Lo único que
necesitas para hablar con tu Ángel es una mente abierta y un corazón
bien dispuesto.
MEDITACIÓN 35 - CÓMO ENFRENTAR EL MIEDO Y LA DEBILIDAD
Ahora
veamos qué representa y en qué consiste nuestro lado oscuro o sombrío.
Abrimos la mente e invocamos a los Ángeles; será bueno tenerlos cerca
cuando observemos las sombras.
Vamos a tomar el
diario o lápiz y papel, porque haremos una lista de nuestras
características negativas, imperfecciones, debilidades en general y
fragilidades humanas. Sobre una de las caras del papel anotamos una
característica que nos genere problemas: por ejemplo, celos, vergüenza,
envidia, codicia, crueldad, enfado dirigido erróneamente, juicio de uno
mismo y de otros, o cualquier cosas que se presente como un aspecto de
lucha en nuestra personalidad.
Ahora, en la
otra cara del papel, vamos a escribir algo sobre el origen de esta
característica, por qué se presenta como una lucha; luego nos imaginamos
de qué nos defiende. En otras palabras, vamos a definir la
característica como si fuera un temor que tenemos y vamos a tratar de
rastrearla hasta llegar a un ejemplo concreto en nuestra vida. Yo creo
que casi todo lo que escondemos en las sombras es el resultado de un
temor generado en la infancia o desarrollado en la vida adulta a través
de las distintas relaciones e intercambios concretados en un mundo de
miedos.
Después de haber hecho este examen,
vamos a fantasear sobre las distintas maneras de eliminar el temor y
vamos a anotar cuál es el antídoto positivo para la característica
negativa. Tendremos que asegurarnos de pedir que los Ángeles se os usen
en esta transformación. Te doy como ejemplo un escenario relacionado con
la característica de los celos. Buscamos el origen de los celos, y
luego imaginamos qué es lo que más tenemos en relación con esta emoción.
Después de esto, vamos a tomar conciencia de
un hecho esencial; tenemos ese temor alojado en la mente justo en este
momento y podemos desarrollar formas constructivas de eliminar el
problema practicando mucho y reconociendo con sinceridad las ocasiones
en que los celos pugnen por aparecer. Aparte, vamos a hacer una lista de
las cualidades positivas y las cualidades de luz que poseemos. Pensemos
ahora en una característica perteneciente a la lista del lado luminoso
que pueda ayudarnos a superar el temor vinculado con la característica
negativa que queremos transformar.
Vamos a
pedirles a los Ángeles que nos insuflen inspiración cada vez que surja
una característica negativa, de modo que tengamos la posibilidad de
rastrearla hasta su fuente (el temor) y podamos decidir suprimirla. El
temor destruye la creatividad y la felicidad.
Permitir
que el temor se apodere de uno sin reconocerlo, conduce a resultados
finales negativos tales como sufrir una depresión, una enfermedad grave o
sentirse atrapado en relaciones desdichadas. Estos resultados negativos
son señales que nos advierten que ya venció el plazo para que
aumentemos la cuota de amor y aceptación de nosotros mismos; son signos
que no sindican que tenemos que regresar al camino correcto y
desarrollar nuestro verdadero y especial don del amor.
Los
Ángeles nos acompañan, y para ellos la perfección no es una aspiración
ni una forma de recompensa. Los Ángeles nos recompensan con sinceridad
para con nosotros mismos, y lo hacen guiándonos para que nos
fortalezcamos interiormente y desarrollemos la tranquilidad y la
felicidad sin motivo, y para que de esa manera nosotros irradiemos un
brillo deliciosa hacia el mundo que nos rodea.
MEDITACIÓN 36 - GUÍA DEL ÁNGEL INTERIOR
Si
realmente creemos que estamos creando una nueva conciencia, entonces
tendremos que liberarnos de una forma de ser antigua y brusca. Aprender a
adaptarse y a apreciar el cambio es una práctica importante. La
práctica de escuchar a la intuición nos permite directamente fluir con
el cambio. Intuición es sabiduría. Sabiduría es equilibrio y criterio
firme. No hablo del criterio de distinción entre lo correcto y lo
equivocado, o entre lo bueno y lo malo, sino del criterio referido a lo
que es apropiado, a lo que nos lleva a tomar una decisión tranquila.
Tales criterios son personales y suponen un conocimiento profundo de uno
mismo. Podemos aprender muchos sobre nosotros a través de la intuición.
Los Ángeles pueden ayudarnos a comprender de
manera persona qué significa la intuición. En realidad, los Ángeles son
los encargados de una gran parte del yo intuitivo. Si observamos la
intuición desde la perspectiva de la conciencia angélica, podemos decir
que la intuición es la forma en que aprovechamos un poder superior en
busca de guía y esclarecimiento. Quizás hayas escuchado decir que “Dios
trabaja en formas misteriosas”. Decimos esto porque muchas veces la
mente racional no puede encontrarle sentido al lado intuitivo de la
vida. Quizás estemos más familiarizados con la mente racional que con la
mente intuitiva. La mente racional precisa explicaciones lógicas,
análisis, definiciones, razones y precauciones. La naturaleza intuitiva
es espontánea y difícil de definir; por lo tanto, ¡es mejor no
definirla! Hace falta práctica para aprender a escuchar la intuición.
El
hecho de establecer la costumbre de escuchar a nuestra sabiduría
interior nos acerca más al yo completo. Primero, permíteme aclarar cuál
es mi pensamiento acerca del Yo Superior. No utilizo la palabra
“Superior” como un juicio de valor, como si el Ser Superior fuera bueno,
el ser medio más o menos y el ser inferior malo. La cuestión no pasa
por el hecho de que estos “Yo” sean buenos o malos, porque ello no capta
su verdadera esencia. Cuando nos sentimos completos, todos nuestros
“YO” se integran y actúan en la misma dirección. El Yo Superior
representa la sabiduría, la conexión con el reino de lo angélico, y la
conexión con el poder superior de la vida. El Yo Superior también es
nuestra naturaleza intuitiva, la fuente de la forma especial y creativa
en que damos amor al mundo. El yo medio es por lo general la parte de
nosotros mismos que mejor conocemos, y que utilizamos para relacionarnos
con los aspectos inciertos de la vida con comodidad. El yo medio
reacciona frente a los aspectos cotidianos de la vida de un amanera que
no es demasiado fuerte ni demasiado leve. El yo inferior podría
imaginarse como una amalgama de las partes de nosotros mismos que no
conocemos demasiado. La palabra inferior en este caso representa el acto
de la represión, de empujar esas cualidades hacia abajo, de enterrarlas
para no tener que vernos frente a ellos todo el tiempo. Si tuviéramos
que tenerlas presente de manera constante llegarían a ser demasiado
intensas y pesadas, por lo que es grandioso tener un espacio donde
almacenar estos aspectos hasta que el Yo Superior los arranque de allí y
los maneje desde la perspectiva de la sabiduría y la luz.
El
estado ideal es cuando llegamos a ser seres integrados completos. Para
llegar hasta allí, es preciso que realicemos mucho trabajo / juego, pero
un buen lugar para comenzar es escuchar a la intuición como forma de
conocer el camino personal y las cualidades que hemos traído a esta
vida. Escuchar a la intuición es lo mismo que escuchar a los Ángeles.
Los mensajes pueden llegarnos de maneras que no estamos acostumbrados a
recibirlo, tales como notar pensamientos extraños e interesantes o
frases sacadas de contexto, o recibir llamados telefónicos peculiares o
encuentros inesperados; no quiero limita las ideas respecto de esto,
porque la intuición es personal de cada uno, lo mismo que la experiencia
angélica.
MEDITACIÓN
Para
esta práctica vamos a entrar en un estado de relajación mediante la
respiración y comenzamos a imaginar el Ángel sabio interior. Podemos
pensar que este ángel guía es un ser separado del Yo Superior, o el
mismo Ser Superior, o que simplemente forma parte de nuestra naturaleza
interior.
Elijamos lo que mejor nos haga sentir;
tratemos de superar la necesidad de definirlo. A medida que
profundizamos en la relajación comenzamos a sentirnos uno con la luz,
una unidad con toda la creación en este espacio sin tiempo, donde
estamos libres de la pesadez de la tierra y el cuerpo. Imaginemos un
encuentro con el Ángel Sabio Guía. ¿Está el Ángel sentado en un cómodo
sillón, o recostado sobre una cama de nubes coloridas? ¿Qué aspecto
tiene? Dejemos volar la imaginación. Vamos a pedirla al Ángel Guía que
nos dé un ejemplo claro de nuestra propia intuición. Quizás nos parezca
que una vocecita clara nos habla. (Una vez más, recordemos que el hecho
de escuchar a la sabiduría angélica nunca nos provocará temor; nos
detenemos si comenzamos a tener imágenes o sentimientos negativos). La
intuición puede tomar la forma de una imagen o un sentimiento visceral.
Simplemente vamos a relajarnos; si parece que nada sucede, también es
importante notarlo.
Estamos tan acostumbrados a
que sucedan cosas que cuando nada sucede pensamos que algo anda mal,
pero no es así. Vamos a divertirnos con el Ángel sabio exterior; este
espacio donde estamos es la fuente del humor y éxtasis divino. Es
también un lugar donde reunirnos con el niño interior, de modo que
podemos desarrollar un sentido de la maravilla y la travesura cuando
estamos con el Ángel Guía.
Si hemos realizado
una conexión equivocada, utilicemos este momento para pedir
esclarecimiento sobre el estado actual de la situación. Si hubiera un
programa cerebral que queramos compilar, vamos a hacerlo ahora. Nos
divertimos por un momento y utilizamos este tiempo “sabiamente”. Cuando
salimos del estado de meditación, vamos a agradecer a los Ángeles para
acercarnos más a un estado de ser completo, total, y les pedimos que no
pongan fin a ese impulso.
MEDITACIÓN 37 - CÓMO JUGAR CON LAS PROYECCIONES
Seguramente,
a todos nos ha sucedido alguna vez que alguien se enojó con nosotros y
comenzó a decirnos cosas tan fuera de lugar sobre nuestra propia persona
que nos preguntamos de dónde había salido eso, y si no nos estarían
confundiendo con otro. Si tal fue el caso, hemos sido objeto de
proyecciones infundadas. La proyección es un mecanismo de defensa que
utilizamos para culpar a otros por nuestras propias faltas, o para
suponer que alguien siente la emoción que nos embarga a nosotros pero
que no queremos enfrentar.
En otras palabras,
cuando no examinamos nuestro lado sombrío podemos terminar proyectándolo
en otros. Si tomamos conciencia de las tácticas de proyección para con
nosotros mismos y otros, tendremos la oportunidad de descubrir nuestro
lado sombrío y el de los demás. Si podemos separar el dolor de un ataque
y observar qué proyectan las personas que nos atacan, podemos aprender
mucho sobre ellas y el lugar de donde proviene. Es preciso que tengamos
una muy alta autoestima y la integridad suficiente para ver que sus
proyecciones no se refieren a nosotros de manera personal. Además, al
escucharnos cuando estamos enojados con otros, podemos aprender mucho
sobre nosotros mismos, si es que tenemos el valor suficiente para
mirarnos con honestidad. Es prácticamente imposible no proyectar. Vemos
partes de nosotros mismos en otros y los aspectos que más notamos en
otros, positivos o negativos, son parte de nosotros mismos.
Todos
sabemos que para vernos el lado de atrás (lo que representa la sombra)
necesitamos un espejo. Hay partes de nuestra personalidad que sólo
podemos ver cuando se reflejan en la personalidad de otra persona; es
decir, cuando se proyectan en otra persona. Hay personas que toman muy
en serio el concepto de la proyección. Por el contrario, yo les aconsejo
que disfruten de las proyecciones. Cuando es uno mismo el objeto de una
proyección se debe otra que se trata de un don de comprensión y no debe
quedarse con lo que se dice sobre uno. Hay que practicar la
indiferencia.
Cuando el que proyecta es uno, se
tiene que aprender a explorar lo que se proyecta y a determinar si es
doloroso para uno mismo y para los que lo rodean. La toma de conciencia y
la aceptación de la realidad conducen a una progresión natural de
nuevas elecciones y formas de ser. Una manera de explorar y jugar con
las proyecciones y con el lado sombrío consiste en dibujar nuestro
monstruo. Se utiliza esta técnica con los niños para ayudarlos a
expresar el enfado de una forma que resulta segura. En general, los
niños no se detienen en pensar lo que se les pide; saben que tienen un
pequeño monstruo. Dado que en el interior todos llevamos a un niño que a
veces se enfada, los adultos también podemos recibir los beneficios de
dibujar nuestros monstruos. Vamos a tomar una hoja de papel y varios
marcadores o lápices de colores (el color es importante en este
ejercicio) y vamos a dibujar el monstruo.
No
nos conviene molestarnos en negar que tengamos un monstruo, ya que este
ejercicio no depende de que lo tengamos o no; podemos dibujar nuestro
monstruo independientemente de lo que pensemos. Tampoco tenemos que
preocuparnos por la habilidad artística; dejémonos ir… podemos dibujar
un mamarracho o burbujas de colores. Una vez terminado el dibujo, le
ponemos un título y escribimos algo relacionado con la causa del enfado
del monstruo. Vamos a escribirlo como si fuéramos el monstruo que cuenta
por qué se enfadó. Al terminar de escribir vamos a estudiar el monstruo
y lo que dijo. ¿Cuál es el origen de las cosas que dijo el monstruo?
Quizás descubramos que todo se origina en un espacio de temor, o quizás
algo diferente.
Vamos a pedirles a los Ángeles
que nos brinden percepciones más profundas e ideas nuevas. Pero no nos
dejemos llevar demasiado por el autoanálisis; no queremos hacer de esto
nada demasiado profundo ya que intenta ser una expresión segura de
cierto enfado o temor con el que hemos estado viviendo. Muchos llegamos a
convencernos de que si tan sólo fuéramos perfectos y no tuviéramos
malos pensamientos, nuestros familiares o cónyuges o quienquiera fuera
no se comportarían de determinada manera. Así que ocultamos los
pensamientos en un armario. Ya es tiempo de sacar nuestros monstruos del
armario y de explorar los malos pensamientos, de tomar conciencia de
que no es por ello que los demás cambian su conducta hacia nosotros, a
menos que los ataquemos, y ésta es una reacción que podemos controlar.
Es
preciso que los niños aprendan a expresar afecto y amabilidad en sus
acciones, y formas de manejar sus enfados de manera constructiva
mediante el autocontrol. En otras palabras, nadie nació perfecto;
tenemos ciertos aspectos que son indicios de una lucha interior a la que
podemos sobreponernos mediante una práctica espiritual honesta, que
transformará esos aspectos negativos en fortalecimiento. Con la
aplicación del ejercicio o la práctica adecuada, nuestro punto más débil
puede convertirse en nuestra mayor fortaleza. No nos sobrepondremos a
las debilidades si las escondemos y negamos nuestros sentimientos, sin
importar cuáles sean. Cuando comencemos a tener la valentía suficiente
para observar nuestro lado oscuro sin juzgarnos negativamente,
aprenderemos a iluminar la oscuridad.
Vamos a
invocar a los Ángeles para que permanezcan junto a nosotros mientras
observamos el lado oscuro; a la luz de los Ángeles los aspectos ocultos
de la personalidad no parecen tan graves e insuperables. Cuando estamos
frente a la luz y los Ángeles, y andamos el camino junto a ellos, las
sombras ya no podrán controlarnos, porque cuando la luz de los Ángeles
ilumine las sombras podremos ver qué es lo que hay allí y sabremos que
tenemos la capacidad de transformar la oscuridad. Aprender a desarrollar
el Dios que llevamos dentro en lugar de ir tras el mal en otros, es una
buena manera de seleccionar nuestras proyecciones. Ir tras el mal en
otros no sirve a nadie como ayuda constructiva.
Si
hacemos más lugar en la vida para que Dios y los Ángeles trabajen en
ella, tendremos la creatividad necesaria para manejar las sombras del yo
inferior. Seguiremos de manera natural las sendas hacia el Yo Superior,
lo que a su vez transformará los aspectos del yo inferior. El manejo
constructivo del enfado y el odio no es un proceso fácil puesto que
implica un esfuerzo consciente y mucha práctica. El hecho de reprimirlo
nos perjudica a nosotros mismos y a quienes nos rodean; entonces,
abramos la puerta del armario y liberemos nuestro monstruo mediante una
práctica constante de auto aceptación y el desarrollo de la amabilidad y
la sabiduría en las búsquedas espirituales.
Hasta
el Dalai Lama no duda en admitir que le llevó mucho tiempo de práctica
superar su tendencia a enfadarse. Dijo: “Si por lo general permaneces
enfadado durante diez minutos, trata de reducirlos a ocho. La semana
próxima intenta con cinco minutos, y el mes siguiente con dos. Luego
llévalo a cero. Así se desarrolla y se entrena la mente. Esto es lo que
yo siento y es también la clase de práctica que realizo. Prácticamente
no caben dudas de que todos necesitamos estar en paz. La cuestión,
entonces, es cómo lograrlo. Por medio del enfado no será; por medio de
la amabilidad, el amor, el afecto podemos lograr la paz interior
individual.
MEDITACIÓN 38 - CONEXIÓN CON LA CONCIENCIA ANGELICAL Y DIVINA
Después
de trabajar en tu cielo interior, o sea tu cuerpo mental, te vas a
conectar más arriba; vas a flotar un poquitito más adentro del cielo y
te vas a ir elevando en tu conciencia, vas a encontrar aquel maestro que
tanto buscabas, vas a encontrar a ese Ángel Interno o Guardián de tu
alma que tanto anhelabas. Ese Ángel que te cuida desde siempre, Él
estuvo ahí, te olvidaste, nada más, pero Él estaba. Escúchalo,
escúchalo, que necesita tu conciencia que te diga ahora: ¿Qué es?, ¿Cuál
es tu trabajo aquí y ahora?, ¿Cuál es tu misión aquí y ahora? No es la
gran misión de tu vida, porque la gran misión es infinita, como
infinitos somos, como eternos que somos; pídele ahora: ¿qué necesito
hacer?, ¿qué necesito hacer para evolucionar?, ¿qué tengo que hacer para
crecer, para ser cada vez mejor, para que la ecología interna de mi
propio ser pueda evolucionar? ¿Cómo puedo servir a los demás? ¿Cómo
puedo lograr ser una totalidad con el universo?
Seguí
flotando y conectándote con tu Ángel Interior, que es también tu guía.
Continúa flotando, encontrarás un mago que te dará las fórmulas mágicas
para tu mayor intuición, para tu mayor creatividad, para la
transformación de aquello que ahora quizás te ocupa. Encontrarás que tu
Ángel puede comprenderte; también te ayuda a descubrir toda la alegría,
te revela toda la sabiduría de tu pensamiento y tu entusiasmo empieza a
crecer. En tu mundo interno encontrarás todo lo que quieras, porque vos
lo crees; porque vos lo creas y crees en él. Hallarás en él todo lo que
necesites, porque él es tu universo y tu universo es él. También podéis
descubrir la Divinidad que habita dentro de ti. El centro, ese núcleo,
en el más infinito y chiquitito núcleo de tu interior, el más invisible y
profundo núcleo, es tu Yo Divino. Vas a concentrarte, vas a ver tu luz,
amor, sabiduría y poder. Te va a permitir conectarte con tu verdadero
interior y con tu fuerza interior para crecer. Aprender también
modificando y transformando el yo chiquitito que tiene miedo, porque
desconoce la verdadera naturaleza divina que contiene, con toda la
totalidad y su grandeza.
Si trabajamos en la
conciencia luz de nuestro cuerpo físico, en nuestro Cuerpo Emocional, y
en nuestro Cuerpo Mental, vamos a descubrir que la palabra tiene poder.
También cada acto tiene poder; vamos a descubrir que el silencio y el
amor lo tienen. Nosotros somos los creadores y somos lo que ya está
creado. Aquello que está creado eternamente se va renovando, conservando
y transformando. Luego es importante que tomes conciencia de que tienes
que proteger tu ecología interior, porque eres el puente entre lo
divino y lo humano, entre lo divino y lo animal, entre lo divino y lo
mineral, entre lo divino y lo vegetal; ya no hay tiempo para seguir
pensando que somos chiquitos: ahora ya somos luz. Ahora ya somos
conciencia, ahora ya somos amor. Acciona estos pensamientos, acciona
estos deseos, acciona tu verdadero ser y en tus actos se verán estrellas
de luz que se irán sembrando en tu jardín interior. Y serás modelo para
todos los que te observen y eso ya es un servicio grande que el
silencio de la Divinidad podrá irradiar a través de ti.
MEDITACIÓN 39 - CUERPO MENTAL
Quizás
tu alma alguna vez creó y proyectó ese cuerpo que sois. Imagina
entonces cómo podéis transformarlo cada vez más y embellecerlo cada vez
más. Eternamente joven y perfecto, luminoso y radiante.
Recuerda
un pensamiento tuyo, cuando estás trabajando, cuando estás elaborando
un proyecto, cuando estás recreando el orden para una fiesta, cuando
estás cocinando, observa cómo ordenas tu pensamiento, qué viene primero,
qué viene segundo, obsérvalo. Sin involucrarte emocionalmente,
despacito, observa cómo se van ordenando tus pensamientos; si tenéis que
hacer un estudio, por ejemplo, si tenéis que estudiar una materia, cómo
comenzáis; lo que más te gusta, lo que menos te gusta.
Observa
cómo se va estructurando, como un gran edificio, tu pensamiento:
entonces, recordando eso, vas a observar y vas a verte, cómo es la
energía de tu pensamiento; es como aire, es como una luz o como un rayo
que aparece en las sombras. ¿Cómo es tu pensamiento, qué energía podrías
dramatizar, qué energía podrías observar? Y a través de recordarlo, a
través de grabarlo en tu interior, de elaborarlo en tu interior, vamos a
construir el cielo; si el pensamiento es el cielo, en tu interior está
la tierra, está el agua, está el cielo.
Se
encuentran en nuestro interior el reino mineral con su silencio, el
reino vegetal con su amor, el reino animal con su fuerza; y por supuesto
el reino humano con su sabiduría, el reino angélico con su perfección y
el reino divino en la totalidad de nuestro ser.
Utiliza
también esos reinos para recrear este cielo, para reafirmar este cielo;
al cielo vamos a recrearlo como un gran paisaje dónde vas a iluminar
cada estrella con un pensamiento. Pensamientos de eficacia, pensamientos
de vigor, pensamientos para despertar cada día.
Despertar
en el sentido de estar más alertas, ser más verdaderos; pensamientos de
acciones correctas, pensamientos de autodominio; y vas a imaginar que
estas palabras son como estrellas de luz en el cielo, vas a ver
pensamientos de éxito que se van materializando en el tiempo y espacio
que decidas.
En la mediad en que tus
pensamientos de realización se concreten vas a tener más autoconfianza y
autoestima, y tu vida va a ser una fiesta.
Vas a
ir descubriendo tus pensamientos de autoconciencia, pensamientos de
auto observación; estos pensamientos, como estrellas de luz, van a
brillar cada vez más en tu cielo interior; como planetas de luz vibrando
en tu cielo también se van a encontrar los pensamientos de creatividad,
estrellas de provisión infinita, estrellas de intuición verdadera,
estrellas de sabiduría.
Astros de integración,
de conciencia del todo, estrellas dentro de tu cielo vibrando; y vas a
encontrar una clave, una palabra, quizás una llave para recordar esta
enseñanza cuando realmente tengas que estructurar una idea, estructurar
un trabajo, estructurar una acción.
Cuando no te
sientas eficaz o con capacidad para realizar o crear, recordarás esa
llave, y esa llave maestra va a nutrir, va a enamorar tu conciencia y va
a darte los datos que necesitas; puede ser una palabra, una imagen, un
número. Porque dentro de ti, en tu cielo interior, está todo el
universo; porque sois el universo. Y el universo sois vos.
Vas
a llamar al Ángel de la Sabiduría y le vas a pedir que te recuerde
siempre que en todo lo creado y lo no manifestado todo el universo está
sostenido y vive en tu cielo interior.
MEDITACIÓN 40 - CURAR NUESTROS ESPEJISMOS
A
medida que trabajamos con nuestra amorosa Presencia y nuestro Ángel de
la Guarda vamos a aprender que hace mucho tiempo nos están cuidando, y
nosotros quizás nos olvidamos de registrarlos. El cuidado de los Ángeles
es como una gran madre, que nos cuida y nos alimenta con amor. Esta
programación es para tomar conciencia y ver algunas de las situaciones
que vivimos, que son reflejos de deseos de nuestras propias confusiones
en todos los planos. Son como hechizos que nos hacemos, como espejismos
que provocan nuestras emociones, nublando nuestra mente con falsas y
sombrías imágenes. El espejismo de la imagen que queremos darles a los
demás; de poder, saber, ser popular, de destruir, de ser castigados por
la vida, del miedo a las enfermedades.
El
espejismo de la ambición, de ser víctimas, de someter o ser sometidos,
de haber sido embrujados, engañados, estafados, de que la vida es una
lucha, o de que todas las personas nos generan conflictos. El espejismo
de las expectativas de pensar que los otros nos tienen que dar aquello
que no nos damos a nosotros mismos. El espejismo del trabajo y sus
recompensas, del paraíso o del infierno, de la muerte como final de
todo, de fanatizarnos con una verdad absoluta, de todo lo oculto y
misterioso y el que proyectamos en nuestra familia, hijos, pareja. Hay
tantos espejismos como quieras encontrar. Desde el centro del corazón
vamos a pedirle a nuestra presencia, al Ángel de la Guarda, al Ángel de
la Presencia, al Ángel de la Sabiduría, que se tomen de la mano unidos
en nuestro interior, como si fueran las manos tomadas de toda la
humanidad.
Empezamos a sentir, por esa intensa
vibración que genera la energía que invocamos, un alivio profundo, un
estado de paz, de amor y de curación. Nosotros mismos continuamos, en el
proceso de curación, con una luz rosa dorada. La niebla del espejismo
ilusorio se va a ir disipando a media que tomemos conciencia del origen,
la causa, la razón y el efecto de ese factor negativo que está
bloqueando a veces toda nuestra realidad, no permitiendo ver el valor de
nuestro verdadero ser, nuestras potencialidades, y tapando lo sueños
posibles para nuestra evolución. También es importante chequear hasta
dónde está niebla invadió nuestro cuerpo, casa, lugares de trabajo, cada
sitio donde pisamos, recorrerlos y convertirlos en una luz rosa dorada
que es el rayo del amor, de la paz y de la unión con nuestra Divinidad
interna.
MEDITACIÓN 41 - ALINEACIÓN CON OTRA PERSONA
Esta
alineación os permitirá conectar vuestros chakras, creando un potente
campo de energía para la comunicación angélica. Dejad a mano cuadernos y
bolígrafos para el proceso de Apertura que seguirá poco después.
1) Cerrad los ojos. Enviad raíces hacia la tierra y fibras al cielo.
2) Llevad la energía de la tierra hacia el chakra de la raíz y la energía celeste hacia el chakra de la coronilla.
3)
Cuando tengáis una clara sensación de las energías en ambos chakras,
visualizad un rayo de luz que surge de estos chakras y conecta a cada
uno, en línea recta, con el respectivo compañero. Sentid la luz que
conecta los chakras de la raíz y de la coronilla de ambos.
4)
Cuando hayáis establecido una firme conexión entre vosotros, llevad la
energía terrestre hacia arriba, hasta el chakra sexual y la celeste
hacia abajo, hasta el Tercer Ojo. Una vez más visualizad un rayo de luz
que parte de cada uno de esos chakras y se conecta con el respectivo
compañero.
5) Recibid cada uno los rayos del otro en los propios chakras.
6)
Cuando la conexión entre ambos chakras sexuales y del Tercer Ojo sea
clara, moved las energías una vez más, hacia los chakras del plexo solar
y de la garganta. Visualizad rayos de luz que fluyen de ellos y se
conectan con los respectivo chakras del compañero.
7) Recibid esos rayos en vuestros propios chakras.
8)
Cuando las energías se conectan con los chakras de la garganta, afinaos
juntos emitiendo el sonido Om. Continuad afinando hasta que ambos
sintáis el tono resonando en el cuerpo.
9) A
continuación llevas las energías de la Tierra y del Cielo a los Chakras
del Corazón y del Timo. Enviad un rayo de luz desde estos chakras hacia
los respectivos del compañero.
10) Recibid el
rayo de luz que proviene del compañero en vuestros propios chakras del
corazón y del timo. Observad cómo experimentáis esto. Permitid que la
sensación sea tan profunda como se pueda. Reparad en que vuestros
Ángeles ya están presentes y abríos a sentir su amorosa energía.
11)
Cuando ya estéis listos, abrid los ojos Permaneced algunos minutos en
silencio y en mutua compañía para permitiros la plenitud del placer en
lustra alineación.
MEDITACIÓN 42 - MEDIDOR DE ESPERANZA
La
esperanza es un valor; es uno de los valores más importantes. Cuando
ignoramos la esperanza, sentimos que estamos en medio de aguas
turbulentas, pero cuando nutrimos la esperanza y creamos situaciones
donde ésta pueda alimentarse, la vida se convierte en una navegación
apacible. Cuando nos concentramos en todos los males e infortunios
salidos del cántaro de Pandora, perdemos temporalmente la esperanza en
el futuro.
Estos males, como la codicia y las
calumnias, corrompen casi todos los rincones de nuestra sociedad. La
codicia encarcela a los hombres y las mujeres de Dios, y la codicia de
los grandes negociados está destruyendo la Madre Tierra. La codicia nos
acecha a la vuelta de cada esquina, por lo que nuestra es la decisión de
mantener viva la esperanza en el corazón y de crear el futuro para el
mayor bienestar de todos. No es fácil mantener viva la esperanza en
especial cuando se vive con los ojos abiertos, pero los objetivos
importantes no siempre son fáciles.
Para crear
un medidor personal de esperanza, tengamos a mano nuestro diario o un
anotador. Primero, crearemos un fondo fiduciario de esperanza, en el que
incluiremos situaciones y cosas que nos dan esperanza. Comencemos a
pensar en la esperanza, lo que significa para nosotros, y en los
elementos de nuestra vida que alientan la esperanza. Por favor, no
generes un fono de lo que la desalienta – un cántaro de Pandora personal
– porque no vale la pena. Permíteme recordarte que no bases demasiada
esperanza en otras personas. En otras palabras, no esperes que alguien
venga a rescatarte; créeme, no es esto lo que tú quieres. Tengamos
esperanza en confiar en los Ángeles y en nosotros en cualquier
situación.
Vamos a inaugurar el fondo de
esperanzas; podemos depositar más cosas posteriormente a medida que
crezcan nuestros recursos. Para crear el medidor de esperanza, vamos a
dibujar una figura simple que represente un medidor. En un extremo
escribimos la palabra ESPERANZADO, y en el extremo opuesto escribimos la
palabra DESESPERANZADO. En el medio escribimos NEUTRAL. Vamos a
controlarnos con el medidor todos los días. Cuando la esperanza sea baja
vamos a hacer un retiro del fondo de esperanzas. Por ejemplo, podemos
leer un capítulo de un libro, ir al parque para ver jugar a los niños,
ver una película inspiradora, visitar a amigos divertidos y hablar de lo
que sucede con la esperanza de ellos, o simplemente quedarnos sentados
en paz y pedirles a los Ángeles que nos traigan algo de esperanza. La
esperanza es un instinto de supervivencia, especialmente en los días que
corren.
MEDITACIÓN 43 - CAMBIO DE CONDICIONAMIENTOS
Todos
tenemos condicionamientos, culturales, sociales, religiosos, falsas
creencias que conocemos pero que no sabemos cómo cambiar. La energía a
veces necesita un intercambio de dar para quitar o disolver. Si le damos
a nuestra mente un problema sin hallar luego la solución, es probable
que nuestra mente siga enfocada en el bloqueo por no haber encontrado
una salida que pueda tranquilizarla. Cuando le informamos la nueva
respuesta, en general inmediatamente nos ponemos a realizarla, dejando
el problema muy atrás. Después nos conectamos con nuestro interior.
Vamos a invocar al Ángel de la Guarda para que a su vez se conecte con
el Ángel Constructor y con el Creador. Lo llamamos para pedirle que nos
muestre una imagen pasada de nosotros mismos, donde una falsa creencia o
un equivocado condicionamiento nos produjeron un error, un dolor o
cualquier situación conflictiva.
A nuestra
Amada Presencia le pedimos que nos recuerde o que nos ayude a
concientizar cuál es el mandato interno que todavía en el presente nos
determina llegar a la misma situación pasada o similar. Con las imágenes
presentes y pasadas, y la comprensión profunda del motivo central,
hacemos una masa imaginaria y la convertimos en luz blanca brillante. En
este instante llamamos al Ángel Constructor para que recree con esa
materia de luz, semillas que contengan en su esencia todas las nuevas
posibilidades para desarrollar: éxito, amor, autoestima, sabiduría,
misericordia, eficacia, fortaleza, claridad, capacidad de aceptación,
audacia, coraje, cambios favorables a cada momento, creatividad,
presencia mágica, angélica, a cada instante, renovación, curación,
percepción, intuición, plenitud, templanza, autoconfianza, alegría,
protección, belleza, etc., etc.
Esas perfectas y
divinas semillas, el Ángel Creador las va a tomar y sembrar en el
espacio interno que él considere mejor. Veremos en poco tiempo un cambio
grande en nuestras vidas, si nos permitimos amasar para luego cosechar
el pan de luz, con el cual tenemos que alimentar nuestra alma A través
de la nueva semilla programada en nosotros, a través de los Ángeles y
nuestra Presencia mágica, podremos vivir plenamente nuestro único
tiempo: el presente. Ahora en tu interior, en tu corazón vuelve a
hacerte esa pregunta, trata de verla, a ver si la respuesta que sientes
es la misma que antes. La luz sí que nunca falla. El silencio es
justamente cuando desaparecen las espadas, cuando desaparecen las
imágenes que no corresponden a la creación de ese ser que somos.
Agradecemos otra vez, y lo más tranquilamente y en paz, cuando quieras,
abres los ojos.
MEDITACIÓN 44 - INVOCAR A LOS ÁNGELES POR OTRA PERSONA
Una
vez que has contactado con tus Ángeles, puedes abrirte para recibir
mensajes para otras personas. Puedes hacerlo con amigos que también
hayan aprendido a conversar con sus Ángeles, siempre que ellos consulten
a los Ángeles por ti al mismo tiempo. O puedes hacerlo sola.. ¡Pero
sólo por petición de otra persona! Para este proceso debes estar
cimentada, liberada y alineada. Ten a mano libreta de anotaciones y
bolígrafo
1) Siéntate en silencio, con los ojos cerrados, a una distancia de entre 15 y 25 cm de tu compañero
2)
Invoca a tu Ángel y la presencia del Ángel de tu amigo. Pide a estos
Ángeles que permanezcan contigo mientras te abres para recibir
información que sirva al mayor bien de todos.
3)
Haz surgir una imagen o una sensación de tu Ángel. Recibe de buen grado
lo que surja, como manifestación de la presencia angelical.
4) Ahora permite que surja una imagen del Ángel de tu amigo.
5)
Visualiza a los Ángeles interactuando con el ojo de tu mente. Imagina
que se saludan. ¿Cómo lo hacen? ¿Se estrechan la mano? ¿Agitan las alas?
¿Danzan? ¿Realizan una referencia formal?
6)
Pon la imagen de los Ángeles en tu chakra del corazón. Retenla allí
algunos instantes hasta que comiences a experimentar calor en el corazón
y sientas la presencia de los Ángeles.
7) Ahora pon la imagen de los Ángeles en tu tercer ojo y retenla también allí.
8)
Cuando el corazón y el tercer ojo se llenen con la energía de los
Ángeles, abre los ojos y escribe la pregunta. Cierra los ojos y repite
la pregunta para tus adentros imaginando que las palabras están escritas
en tu corazón y en el tercer ojo.
9) Cuando comiences a oír palabras o a recibir impresiones, abre los ojos y anota lo que estás recibiendo.
10) Cuando las palabras cesen, no olvides dar las gracias a ambos Ángeles.
Dedica
algunos instantes a apreciar la energía que te rodea. Luego lee lo que
has escrito. Si el tono de la transmisión es afectuoso y está lleno de
aceptación, si no da consejos específicos, sino suave orientación, y si
crees que a ti te reconfortaría recibir ese mensaje, compártelo con tu
amigo. Si su tono es de regaño o de amenaza, si insta a actuar de modo
especifico, es muy probable que tu mente se haya interpuesto. Deséchalo y
pide otro mensaje.
Los Ángeles no dan órdenes:
nos alientan a utilizar nuestras propias facultades de mente, corazón y
espíritu, y a tomar decisiones por cuenta propia. Puedes hacer también
este ejercicio cuando el amigo no está presente, siempre que él te haya
pedido que lo hagas. Simplemente comienza con el paso 2), después de
hacer la Cimentación, la Liberación y el Alineamiento. Muchas personas
descubren que, cuando comienzan a conversar con sus Ángeles, es aún más
fácil obtener información para otros. Esto se debe a que no tienes un
interés personal en la respuesta. La neutralidad siempre brinda
claridad. Si quieres información sobre tus relaciones con otra persona y
no tienes su acuerdo, consulta con tu guardián personal y con el Ángel
vinculador de tu relación.
MEDITACIÓN 45 - CURAR EL PLANETA
Estamos
acostumbrados a considerar la energía del planeta algo externo a
nuestro ser interior. Sin embargo, toda forma parte de la ecología,
nosotros somos uno con el Universo.
Es muy
importante que empecemos a tomar conciencia de esto, para que nuestro
crecimiento sea una totalidad concreta, donde los Ángeles puedan crear
su plataforma de luz, porque necesitan de nosotros para realizar mejor
su servicio. Este ejercicio nos va a permitir comprender hasta qué punto
podemos nutrir y participar para que nuestro mundo sea realmente mejor.
Primero relajamos nuestro cuerpo; vamos a
cerrar los ojos y chequear la energía de luz que somos. Ya podemos
iluminar nuestros bloqueos físicos, emocionales o mentales y curar en
forma más afinada nuestro sistema interno.
Comenzamos
siempre relajando nuestros músculos y nos conectamos hasta llegar al
plano molecular de todo nuestro cuerpo. Visualizamos el Planeta Tierra
totalmente iluminado, en el corazón, dentro de nosotros. Construyendo en
nuestro corazón una copa dorada que sostiene el mundo; en la copa hay
luz, hay fuego, hay agua. Todos esos elementos van purificando la Tierra
a medida que la copa va sosteniendo la energía del planeta. Nutrimos la
Tierra con la ternura y el amor, como lo haríamos con un bebito.
Al
finalizar el ejercicio cerramos la imagen con al siguiente afirmación:
“Nuestra Tierra es luz, amor y paz. Se nutre todo el tiempo de la Amada
Presencia que vive en plenitud en cada ser que la habita, con la copa
eternamente llena en cada corazón”. Pedimos a todos los Ángeles que se
cumpla esta nutrición y curación.
MEDITACIÓN 46 - LOS CREADORES
El
Creador hizo todo y a todos. Nosotros también somos creadores; hemos
sido dotados con muchas de sus cualidades, pero la mayoría de las veces
esos dones están tan enterrados que apenas se los reconoce y se los usa.
La preocupación es una forma de energía
directa. El desasosiego te aparta de de cualquier otra cosa y te dirige
de una manera concentrada hacia lo que temes. En este sentido, el
desasosiego y el miedo se unen para traer a tu existencia exactamente
aquello a lo que le tienes miedo. Dejarás de preocuparte cuando
entiendas las leyes universales que rigen el funcionamiento de las
cosas. Una de esas leyes sostiene que cuanto se vea en la mente, sea
bueno o malo, si se cree en ello, ocurrirá. La creación comienza en los
pensamientos y en la imaginación. Inmundo de causas y efectos. Si
mirases hacia adentro, verías lo correcto. Lo que se siembra, se
cosecha. Tal como pienses, crearás, sin ninguna duda.
El
trabajo interior representa mirar dentro de sí mismo. Todas las
respuestas están dentro de ti. No fuera, ni en otra persona, ni siquiera
en lo que llamas Dios. Lamentablemente no entiendes a Dios ni tampoco
los métodos que Él usa para encontrar las respuestas. Es por eso que no
nos da las soluciones cuando le rezamos con tanto fervor. No tenemos que
rogar o suplicar. Sólo tenemos que relajarnos, tranquilizarnos, creer
en nosotros mismos y en nuestras capacidades inherentes.
De
este modo, comenzamos a obtener nuestras propias soluciones bajo la
forma de ideas. Debemos creer y confiar en el proceso. Dios no retiene
ni nos oculta nuestras cosas buenas; a menudo, simplemente somos
incapaces e ver que ya poseemos, o podemos poseer, todo cuando deseamos.
Las religiones son como las escuelas en diferentes países. Enseñan
básicamente lo mismo, pero en diversos idiomas y de distintas maneras.
Algunas escuelas pueden prestar más atención al arte o a la historia,
mientras que otras ponen más énfasis en la química o las matemáticas.
Pero hay un hilo común a todas ellas: ellas conducen al mismo lugar, al
Templo de la Sabiduría y de la Luz.
Así que
Dios, bajo cualquier nombre, sigue siendo Dios. El verso de los antiguos
hebreos “Escucha, Oh Israel, el Señor tu Dios es Uno” es ahora tan
verdadero como lo fue entonces, o lo será siempre. Dios no está en un
lugar o época determinados. Dios está aquí y ahora. El cielo o el
infierno están aquí y ahora. Dios no se sienta en un trono dorado
acompañado por Ángeles que tocan arpas o vuelan durante todo el día.
Dios está en cada persona, en cada forma de vida, en cada parte y en
toda creación. Está tan presente en ti como en cualquier otra forma de
vida que exista en los límites de esta galaxia. Dios también escucha y
se interesa por sus criaturas. A Él le importan incluso los gorriones y
los lirios del campo.
MEDITACIÓN 47 - GRUPO DE ÁNGELES
Los
Ángeles tienen dos maneras de trabajar con nosotros en la curación y la
transformación globales. La primera es mediante la información directa,
compartiendo con nosotros el conocimiento que nos pondrá a todos en el
siguiente paso de la tecnología, cultura y conciencia. Esto ocurre cada
vez que nos abrimos a nuestros Ángeles y dialogamos con ellos. La
segunda manera es compartir su energía; al hacerlo, los humanos
avanzamos hacia una conciencia colectiva; nos convertimos en un solo
corazón, una sola mente. Los Ángeles son seres colectivos, al tiempo que
son muy individuales.
Desde hace siglos, los
humanos luchamos para equilibrar nuestra individualidad con nuestra
naturaleza colectiva. En casi todas las culturas, el individuo ha sido
incluido en lo colectivo, pero en las últimas centurias hemos visto un
creciente interés por el yo, a veces en oposición a la comunidad y, a
veces, a expensas de ella, sea ésta la familia, la ciudad o la nación.
Cuando alternamos con los Ángeles, cada vez que absorbemos su energía,
recibimos por ósmosis parte de su capacidad de ser exactamente quienes
son, en armonía con el todo, en armonía con Todo lo Que ES.
Los
participantes en una reunión con los Ángeles llegan cada uno con su
creencia diferente. Al invocar a los Ángeles, que son comunes a tantas
tradiciones religiosas, se eliminan todas esas diferencias, creando un
terreno común, un campo de conciencia unificada. La energía de este
campo es más profunda y más amplia que la que puede producir un solo
individuo. Abarcados en ese campo que sostiene el Ángel Vinculador del
grupo, a todos les resulta muy fácil conocer a sus propios Ángeles. La
contribución de cada uno, cordialmente incorporada a ese campo, se suma a
una sabiduría y una visión que una sola persona, por sí, no habría
podido crear. Cada individuo cuenta otra porción de la historia humana;
cada uno lleva una parte del sueño que todos necesitan oír.
En
sucesivas ocasiones alguien expresa un pensamiento utilizando las
mismas palabras que otra persona pudiera decir. Eso reanima y
reconforta. Uno se siente completamente escuchado y comprendido. No
importa de qué boca hayan surgido esas palabras: lo que se debía decir
ha sido dicho. Y uno sabe, con tremendo alivio, que no es necesario
hacerlo todo por sí solo. Porque no se está solo. Dos amigos que forman
un grupo con sus Ángeles crean una diferencia en el mundo. La familia
que se abre a los Ángeles crea una diferencia en el mundo. En la larga
historia del planeta, algunas culturas han cobrado conciencia de los
reinos celestiales de maneras tan suaves y sinceras que pudieron
trabajar con ellos a lo largo de los siglos. Una de esas maneras fue
lograda a través de las familias.
MEDITACIÓN 48 - EL TREN DE LA VIDA
¿Y
sabes lo que mi Yo Superior me dijo acerca de todo esto?
Parafraseándolo en mis propios términos sería más o menos lo siguiente:
“En realidad no tiene demasiada importancia. Sólo se trata de un poco de
vieja energía que está moviéndose hacia la superficie para ser
transmutada. Deja de preocuparte tanto acerca de dónde y cómo te has
desviado del camino y ocúpate de vivir. Sólo tienes que ser tú mismo,
cualquiera sea ese particular Yo que estás siendo un determinado día.
Nadie está llevando la cuenta de las veces que has sentido un poco de
ira, ansiedad o incertidumbre, y el universo no te va a abuchear si no
estás permanentemente en la cúspide del mundo. Así que deja de forzarte
tanto para ser espiritual, pues ya lo eres. Todos lo son, de modo que
relájate y disfruta del recorrido”.
Así
llegamos a comprender que Dios nos ha creado, que nos ama, que nos
acepta tal y como somos, que nos tiene infinita paciencia y que nos es
imposible interrumpir el proceso divino. No podemos abandonar el tren,
nadie puede hacerlo. La verdad es que todos nosotros estamos volviendo
al hogar. De modo que si, en un futuro próximo, te sientes golpeada por
la futilidad, o te parece que las cosas se están cayendo de a pedazos,
sé paciente contigo mismo y acepta el hecho de que no tienes que
preocuparte por tus problemas, pues todas las cosas están en camino de
resolverse bien. Sólo relájate en aquellos brazos eternos… y “disfruta
del recorrido”.
MEDITACIÓN 49 - COMO INVOCAR A UN ARCÁNGEL
Nos
sentamos tranquilamente, nos relajamos y tratamos de aquietar nuestra
mente, para lograr el estado espiritual ideal. En el momento de rezar,
lo hacemos con la oración correspondiente al arcángel determinado.
Pedimos la presencia del arcángel.
Cuando
comenzamos a visualizar la luz en el horizonte, veremos que esa luz
tiene un color determinado, que corresponde al color de rayo del
arcángel invocado. Luego esa luz se agranda, se nos acerca y nos inunda.
En ese momento hacemos el pedido por el cual lo hemos invocado. Una vez
que “sentimos” que fuimos escuchados, le damos las gracias, con la
seguridad de que nuestro pedido se realizará. Vemos como esa luz se
retira hasta desvanecerse totalmente en el horizonte.
ARCÁNGEL MIGUEL:
El Arcángel Miguel, vibra con el color azul. El día de la semana que le
corresponde es el domingo. Sus virtudes son la voluntad, de Dios, el
bien, la bondad, la fe, el poder, la fuerza, protección, equilibrio. La
presencia de este arcángel se puede invocar si son necesarios en un
momento de decisión importante, falta de iniciativa para comenzar algo
nuevo, busca de protección de cualquier orden o por sentirse solo en un
momento acuciante.
ORACIÓN: En nombre de
la amadísima Presencia de Dios YO SOY En mi y en toda la humanidad;
Invoco tu presencia Amado Miguel Arcángel Y a tus legiones de Ángeles
Azules para que me protejan a mí A mis seres queridos ya toda la
humanidad. ¡Te doy las gracias!
ARCÁNGEL JOFIEL:
Se invoca su presencia en momentos tanto de ayuda en cosas mundanas
como así en lo relacionado a planteos existenciales, como ejemplo valga
lo siguiente: ayuda intelectual, momentos de dudas, incomprensión,
confusión.
ORACIÓN: Amadísimo arcángel
Jofiel Y tus legiones de la iluminación y la sabiduría, Envuélveme en
tus rayos iluminadores Para que yo sea capaz de dominarme, Enséñame a
exteriorizar las ideas divinas Que me vienen de Dios, a la forma. ¡Os
doy las gracias!
ARCÁNGEL CHAMUEL: Sus
virtudes están ligadas al amor, adoración, opulencia, riquezas. En el
amor comprende todo lo relacionado con la trascendencia, el amor a un
apersona, el amor a Dios y a Dios mismo, que a través de Él amamos al
hermano que sufre, al hermano que goza de la alegría de una
circunstancia. La adoración va como acto reflejo del amor a Dios, cuando
adoramos a Dios, se refleja nuestra adoración hacia toda la creación,
amando a la humanidad. Pero por sobre todas las cosas, reflejar la
adoración de Dios, amándolo y con su reflejo para comenzar por amarnos a
nosotros mismos, para que así amemos a los demás. La opulencia y la
riqueza no son más que lo que nosotros deseamos a los demás, el arcángel
Chamuel dice que deseemos muchas riquezas a los demás, para así
nosotros volvernos más ricos. Siempre tendremos riquezas, cuando
compartamos las pequeñas posesiones que poseemos, comenzaremos a recibir
más de lo que damos.
ORACIÓN: Amado
arcángel Chamuel Te amo y te bendigo y te ruego Que me mantengas sellado
en un pilar De llama rosa de amor y adoración a Dios, Hasta que se haga
contagiosa a toda la vida, Que yo contacte, hoy y siempre. ¡TE doy las
gracias!
ARCÁNGEL GABRIEL: Se torna
necesaria su invocación en los momentos de gran abatimiento, estados
depresivos, por las personas que en algún momento de gran necesidad
espiritual, se siente muy alejada de la gran sabiduría divina y del amor
que Dios le está enviando en ese y en todo momento de su vida. Al
invocar su presencia hace que esa persona adquiera una elevación
espiritual de tal magnitud, que se sienta más cerca de Dios, notando la
presencia divina a través de su arcángel Gabriel. La resurrección y
ascensión se ve representada por la transmutación de un momento
acuciante de necesidad espiritual, a sentir que no todo se puede ver y
tocar, como estamos acostumbrados a hacerlo. La virtud de la pureza es
la necesaria para encontrar un camino y lograr la armonía y el
equilibrio.
ORACIÓN: Amadísimo arcángel
Gabriel Arcángel de la pureza y de la resurrección Te amo y te bendigo y
te doy gracias por lo que Tú significas para mí y para todos los niños y
Juventud de esta tierra. Carga estos mis decretos con tu presión
Cósmica de amor YO SOY la resurrección y la vida YO SOY la resurrección y
la vida YO SOY la resurrección y la vida Te doy las gracias en nombre
de todos.
ARCÁNGEL RAFAEL: Se lo invoca
en momentos en los cuales hace falta vencer la falsedad, dando por
abatida a una mentira. Tiene por principio elevar a la verdad, disipar
la sospecha de la mentira. Gran ayuda en momentos donde la salud flaquea
y se hace presente la enfermedad, tanto en la parte espiritual o mental
como así en la curación de una enfermedad del cuerpo físico. Se invoca a
este arcángel cuando falta la constancia o se pierde la credibilidad de
la presencia divina en un momento en el cual una persona tiene una
recuperación lenta o no se recupera de una enfermedad. Sin embargo se
dice que al lado de una persona enferma se encuentra un enviado de este
arcángel, velando para su recuperación.
ORACIÓN:
Amado Rafael, arcángel de la curación y de la consagración, Te amo y te
bendigo y te doy las gracias Por todo lo que has hecho por mí y por
toda la humanidad. Séllame en tu llama de la curación y de la
consagración Y ayúdame a estar consciente únicamente de la perfección.
¡Te doy las gracias!
ARCÁNGEL URIEL Se
invoca a este arcángel en los momentos en los cuales estamos pasando una
prueba y donde la desesperación se hace dueña de los sentimientos y de
los pensamientos. En los momentos que la paz interior o es posible,
acuciado por una circunstancia, nos hace presa fácil la desesperación.
Con su invocación se recupera la paz necesaria para poder sobrellevar un
mal momento. La paciencia y la tranquilidad lograda con su invocación
me abren los horizontes para así lograr las soluciones adecuadas. Se
dice que San Cayetano fue guiado por este arcángel, cundo estuvo en la
tierra, Uriel le proveyó de la paciencia y la credibilidad para tener
confianza en la presencia divina de Dios en todo momento.
ORACIÓN:
Amado Uriel, arcángel de la providencia Te amo y te agradezco por tu
abnegación Hacia mí y hacia toda la humanidad. Por tanto dones ayúdame a
mí y mis seres queridos A conservar sin desvíos el sendero de la paz,
Armonía y felicidad ¡Te doy las gracias!
ARCÁNGEL ZADQUIEL:
A Zadquiel se lo invoca cuando se hace necesario un cambio. Ese cambio
debe ser de cambiar lo negativo en positivo. Cuando una circunstancia es
adversa, hacerla rotar para encontrar en ella la parte positiva. Cuando
en determinada ocasión se siente con los límites muy cercanos, en los
cuales se siente encerrado en sí mismo, sin poder ver más allá de la
razón consciente, se hace necesaria una capitalización del dolor, de la
pena y de las adversidades. Este arcángel, obra de una manera
maravillosa con sus amigos, su invocación hace posible una apertura de
los sentimientos hacia la sabiduría divina, confiando en que Él dará
solución a través de su presencia.
ORACIÓN:
Amado Zadquiel, arcángel de la transmutación, Te amo y te bendigo y te
doy las gracias Pon tu gran servicio a mí y a todos los Niños de nuestra
tierra. Te ruego que liberes a todos los niños De todos los errores,
pasados y presentes, Ahora y siempre.
MEDITACIÓN 50 - HACER REALIDAD LOS SUEÑOS
En
este ejercicio usarás las técnicas de Cimentación, liberación y
Alineación que ya has aprendido, junto con una visualización nueva.
Cuida
de que no te molesten; ve a tu lugar sagrado e invita a tu Ángel a
estar contigo. Puedes invocar a otros Ángeles específicos. Por ejemplo:
si el tema es tu espacio vital, ya porque necesites unas casas nuevas o
quieras redecorarla, invitarás también a un Ángel de Ambientes. Ten en
cuenta cuáles pueden facilitarte mejor el fin que tienes pensado y
recíbelos también.
1) Cierra los ojos. Ciméntate, céntrate y alinéate con tu Ángel (o tus Ángeles)
2)
Libera cualquier impedimento, conocido o desconocido para ti, que
pudiera estorbarte en el logro de tu objetivo. Pide a tu Ángel que te
ayude a retirarlos, liberándolos por medio de tus raíces hacia la
tierra.
3) Imagina tu meta y siéntete
experimentándola. Imagina que se torna realidad y repara en lo que
sientes, la ropa que llevas puesta y las reacciones de cualquiera que
pueda estar presenciándolo. Haciendo participar cuanto menos a cuatro de
tus sentidos, vivificas tu visualización y cifras el mensaje en tu
cuerpo físico.
4) Pon esta imagen en tu corazón.
Pide y recibe para ella la bendición de tu Ángel. Siente el calor y la
satisfacción de haber logrado lo que deseas. Agradece el haberlo
recibido.
5) Irradia la imagen desde tu corazón
hasta los brazos de tu Ángel y visualiza a tu guardián rodeándola con
una burbuja de luz violácea.
6) Observa como asciende la burbuja, subiendo y subiendo rumbo al Universo.
7)
Cuando ya no puedas ver la burbuja, abre los ojos Desperézate, camina.
Aparta la cuestión de tu mente, pero permanece abierta para recibir
cualquier señal que te indique que comienza a materializarse.
Fuente: Del Curso de Ángeles de Alexiis
Publicado por María Elena Syro P
Santiago de Cali, Febrero 8 de 2012
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.