lunes, 13 de mayo de 2013
Déjate llevar
¿Quieres lograr la paz interior, plenitud en tu vida y felicidad definitiva?
Sólo
es cuestión de sembrar tu mente de ideas positivas. Nuestra mente sólo
es útil si está llena de pensamientos y sentimientos que nosotros mismos
elegimos y queremos. No nos hace bien si está saturada de respuestas
que no hemos revisado sobre los acontecimientos del pasado. La escritora
británica Tzivia Gover, estudiosa de las filosofías espirituales y
místicas, y autora del libro Tómese la vida con calma, asegura
que no somos conscientes ni de la mitad de los pensamientos que almacena
nuestra mente, sin embargo todos ellos manejan el modo como nos
sentimos y actuamos.
¿Quieres lograr la paz interior, la plenitud en tu vida y la felicidad definitiva? Sólo es cuestión de sembrar tu mente de ideas positivas, y Tzivia Gover te propone estos sencillos ejercicios para lograrlo:
Escucha tu propio silencio. Una forma de meditación consiste en escucharte profundamente. Encuentra un tiempo y un lugar para sentarte tranquila y en silencio unos veinte minutos. Permite que tus oídos se abran y se relajen. Intenta captar el sonido más leve que seas capaz de escuchar, puede ser la ropa que está en la lavadora. Sigue escuchando, oye la electricidad a través de sus cables. Continúa y escucha el latido de tu propio corazón. Sigue escuchando.
¿Quieres lograr la paz interior, la plenitud en tu vida y la felicidad definitiva? Sólo es cuestión de sembrar tu mente de ideas positivas, y Tzivia Gover te propone estos sencillos ejercicios para lograrlo:
Escucha tu propio silencio. Una forma de meditación consiste en escucharte profundamente. Encuentra un tiempo y un lugar para sentarte tranquila y en silencio unos veinte minutos. Permite que tus oídos se abran y se relajen. Intenta captar el sonido más leve que seas capaz de escuchar, puede ser la ropa que está en la lavadora. Sigue escuchando, oye la electricidad a través de sus cables. Continúa y escucha el latido de tu propio corazón. Sigue escuchando.
Aprende
de tu respiración. Cada vez que exhalas, te dejas ir y confías
intuitivamente en que viene otra inhalación que te mantendrá viva. Sin
embargo, muchas veces nos pasamos la vida entera codiciando,
aferrándonos a las cosas, apretándolas tan fuerte que casi las
estrangulamos y les quitamos la vida, incluso aquellas que no son
esenciales o que nos perjudican. Escucha tu respiración y hazle caso al
mensaje que te transmite: déjalo ir que existe mucho más.
Observa
tus pensamientos. Intenta observar el punto donde un pensamiento
termina y empieza el siguiente. Empezarás a ver tus pensamientos uno
tras otro. Ahora intenta percibir el espacio que hay entre ellos. Sé
consciente de que ese espacio aumenta poco a poco, pero no te obligues a
expandirlo, sólo obsérvalo. Cuánto más practiques ver ese intervalo
entre pensamientos, más se irá estirando este espacio de forma natural.
Así podrás ir vaciando tu mente para poder volver a llenarla de un modo
consciente.
Sé consciente de tus
sentidos. Presta atención a todo lo que experimentas. Los cinco sentidos
son tus ventanas al mundo, a su belleza, a una vida complaciente y
llena de significado. Tus ojos te traen el verde de las hojas o el
perfil majestuoso de las montañas. Tus oídos te dan la música, los
cantos de los pájaros, la voz de tu amado. Tu olfato hace que algunos
alimentos y personas te parezcan irresistibles. Tu piel te permite
deleitarte con la sensación del agua, con un abrazo. El gusto te permite
descubrir a qué sabe una fresa o una naranja.
Engrandece
lo bueno. Tus pensamientos tienen el poder de influir en tus
comportamientos y experiencias. Los pensamientos son energía que se
transmite a los demás y que regresa a ti, aumentando o disminuyendo la
alegría y el amor que hay en tu vida. Por lo tanto, concentra tu mente
en pensamientos positivos, en tener siempre gratitud y en apreciar la
belleza de los pequeños detalles cotidianos pero invaluables, como poder
tener a diario tus alimentos.
Practica
la aceptación perfecta. Mantente atenta y dedicada al momento presente,
comprometida con el aquí y ahora. Para ser completa, no necesitas que
suceda nada, sino que aceptes este momento tal como es, porque ahora
mismo no existe nada más que debas tener. Esto no significa no tener
desafíos, porque puedes practicar la aceptación y seguir trabajando para
mejorar y actuar contra las cosas injustas o incorrectas, pero tómalo
todo como un momento perfecto.
Cambia
tus creencias. Haz una lista de tus propios pensamientos respecto a
quién eres tú. Durante años has escuchado mensajes negativos que
quedaron incrustados en tu mente. Si te han dicho que eres egoísta,
sustituye ese viejo insulto por una verdad que te reafirme, como me amo a
mí misma y extiendo este amor a todos los que me encuentro. Si te han
lavado el cerebro para que creas que eres inútil, encuentra un
pensamiento nuevo para programar tu cerebro: disfruto del tiempo y me
relajo para llenarme de energía. Repite tus nuevos mensajes positivos
diez veces seguidas al menos tres veces al día, durante el tiempo que
necesites, hasta que se vuelvan una creencia.
Compartido con mucho cariño,
Isolda
--
--
LA ESPIRITUALIDAD MÁS EXPANDIDA ES EL AMOR EN VERDAD ILUMINADO CON VALORES APLICADOS.
SOCIEDAD BIOSÓFICA NICARAGUA
--
LA ESPIRITUALIDAD MÁS EXPANDIDA ES EL AMOR EN VERDAD ILUMINADO CON VALORES APLICADOS.
SOCIEDAD BIOSÓFICA NICARAGUA
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.