MENSAJE DE VUESTRO PADRE YHVH
Canalizado el 05.04.15 / 00:25 hrs
Hijitos de mi corazón, os habla vuestro Padre YHVH.
Os debo hablar de algo que me preocupa. Yo os he dado un hogar, un lecho donde descansar, una casita donde cobijarse de los fríos, de los vientos, de las lluvias, ropa para cubrir vuestros cuerpos, alimentos de la Madre Tierra para saciar el hambre y agua que corre en vuestros ríos para saciar vuestra sed.
Mas os digo que os valoréis y cuidéis lo que yo les he dado, tratad vuestra casita como un ser vivo, ponle un nombre simbólico como lo hacéis algunos con vuestro vehículo.
Revisen vuestros armarios, muebles de ropa y sacad lo que ya no uséis, deshazte de lo que ya no sirve, recuerda que en vuestra casa circula energía… y a veces cuando habéis usado un traje que te signifique pesares, sácatelo, ya que fue cargado de mala energía y ya es tiempo de sacarlo de tu vida.
Si queréis dar un ropaje, que éste sea perfumado con tu esencia y purificado con tu amor.
Los muebles que ya no utilicéis sacadlos de vuestro hogar, son como bloqueos en vuestro organismo, es decir, la energía quedará atrapada en vuestra casa, por consiguiente vuestra vida quedará afectada; al adquirir muebles usados ¡cuídense de ellos! … trabajen en descargarlos.
Los objetos electrodomésticos que ya no funcionan también debéis retirarlos de vuestro hogar.
No llenéis de cuadros vuestro hogar, no pongáis cuadros que no os agraden porque repercutirán en vuestra estabilidad emocional…
A veces ciertas fotos os traen recuerdos tristes, por eso debéis retirarlas de los álbumes. Nada debe estar en vuestro hogar por compromiso, nada debe estar en el hogar que no os agrade ante vuestros ojos, eliminadlos porque Yo, vuestro Padre, os digo: ‘debéis cuidar vuestra energía, que nada os desarmonice’.
Espero que comprendáis lo que os pido. Así como limpiáis y depuráis vuestro cuerpo físico y espiritual, vuestro hogar prestado también debe estar armonizado con los elementos que depositáis en ella… un equilibrio con el yin y el yang.
También debe haber un equilibrio en los colores de vuestro hogar.
Equilibrio en el ropaje que vosotros lleváis. El azul os da tranquilidad, el rojo es anti depresivo, el verde os da equilibrio, el amarillo dorado o el color salmón, os da concentración e iluminación, el violeta es un sanador total de vuestras emociones, el rosado dulcifica y aquieta las emociones y el negro con el blanco es armonía y equilibrio total.
Como habéis notado, todo tiene que estar en equilibrio, ‘como es afuera es adentro y como es adentro es afuera’. Lo que reflejáis en casa es cómo está vuestra casa, ¿vais comprendiendo?, mi templo debe estar barrido, en orden, como también vuestro hogar…
¿Me dais permiso para entrar en vuestro hogar?
¿Cómo me vais a recibir?
¿Me daréis de beber en jarra de odre o de metal?
Dime ¿está limpia tu casa?
¿Os habéis preocupado de mantenerla limpia, habéis sacudido el polvo acumulado?
En cualquier momento toco a tu puerta, así que os pido: estad preparado para recibirme.
Porque mi casa, allá en los cielos, mis ángeles se preocupan que mis moradas estén bien para recibir a mis hijos amados.
Que así sea, y así será
Hijitos de mi corazón, os habla vuestro Padre YHVH.
Os debo hablar de algo que me preocupa. Yo os he dado un hogar, un lecho donde descansar, una casita donde cobijarse de los fríos, de los vientos, de las lluvias, ropa para cubrir vuestros cuerpos, alimentos de la Madre Tierra para saciar el hambre y agua que corre en vuestros ríos para saciar vuestra sed.
Mas os digo que os valoréis y cuidéis lo que yo les he dado, tratad vuestra casita como un ser vivo, ponle un nombre simbólico como lo hacéis algunos con vuestro vehículo.
Revisen vuestros armarios, muebles de ropa y sacad lo que ya no uséis, deshazte de lo que ya no sirve, recuerda que en vuestra casa circula energía… y a veces cuando habéis usado un traje que te signifique pesares, sácatelo, ya que fue cargado de mala energía y ya es tiempo de sacarlo de tu vida.
Si queréis dar un ropaje, que éste sea perfumado con tu esencia y purificado con tu amor.
Los muebles que ya no utilicéis sacadlos de vuestro hogar, son como bloqueos en vuestro organismo, es decir, la energía quedará atrapada en vuestra casa, por consiguiente vuestra vida quedará afectada; al adquirir muebles usados ¡cuídense de ellos! … trabajen en descargarlos.
Los objetos electrodomésticos que ya no funcionan también debéis retirarlos de vuestro hogar.
No llenéis de cuadros vuestro hogar, no pongáis cuadros que no os agraden porque repercutirán en vuestra estabilidad emocional…
A veces ciertas fotos os traen recuerdos tristes, por eso debéis retirarlas de los álbumes. Nada debe estar en vuestro hogar por compromiso, nada debe estar en el hogar que no os agrade ante vuestros ojos, eliminadlos porque Yo, vuestro Padre, os digo: ‘debéis cuidar vuestra energía, que nada os desarmonice’.
Espero que comprendáis lo que os pido. Así como limpiáis y depuráis vuestro cuerpo físico y espiritual, vuestro hogar prestado también debe estar armonizado con los elementos que depositáis en ella… un equilibrio con el yin y el yang.
También debe haber un equilibrio en los colores de vuestro hogar.
Equilibrio en el ropaje que vosotros lleváis. El azul os da tranquilidad, el rojo es anti depresivo, el verde os da equilibrio, el amarillo dorado o el color salmón, os da concentración e iluminación, el violeta es un sanador total de vuestras emociones, el rosado dulcifica y aquieta las emociones y el negro con el blanco es armonía y equilibrio total.
Como habéis notado, todo tiene que estar en equilibrio, ‘como es afuera es adentro y como es adentro es afuera’. Lo que reflejáis en casa es cómo está vuestra casa, ¿vais comprendiendo?, mi templo debe estar barrido, en orden, como también vuestro hogar…
¿Me dais permiso para entrar en vuestro hogar?
¿Cómo me vais a recibir?
¿Me daréis de beber en jarra de odre o de metal?
Dime ¿está limpia tu casa?
¿Os habéis preocupado de mantenerla limpia, habéis sacudido el polvo acumulado?
En cualquier momento toco a tu puerta, así que os pido: estad preparado para recibirme.
Porque mi casa, allá en los cielos, mis ángeles se preocupan que mis moradas estén bien para recibir a mis hijos amados.
Que así sea, y así será
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