Elohim, enteramente comprometidos con la magia de la realización
08-10-2015
De
la plataforma vibratoria más alta y perimivisa les hablamos en este día
y los saludamos alegremente, pues estamos felices por esta interacción,
una vez más.
Miramos este momento como un niño que espera ávidamente asistir a su dibujo animado preferido.
Él se encuentra en profunda expectativa para ver un nuevo capítulo del mismo.
Y
esta expectativa no le causa ningún mal, por el contrario, el niño,
mientras llega la hora, pasa el día interactuando con aquella buena
emoción, permitiéndose viajar mentalmente en las imágenes, sonidos,
emociones, descubrimientos, que aquel nuevo episodio del dibujo animado
preferido le proporcionará mientras llega la hora de verlo en la TV.
Y tenemos dentro de eso una gran y profunda enseñanza a pasarles.
Y
queremos, nos gustaría además, que dejaran ir todos los quehaceres, si
es posible, para leer este mensaje con bastante atención y claro, buena
emoción.
Cuando
nuestro canal era un niño, encajaba exactamente en la ilustración que
dimos encima del niño que estaba ávido por el dibujo preferido. Y cada día era transmitido un nuevo episodio.
Y cuanto más se desarrollaba la historia de ficción, más provocaba en él una cálida sensación.
Una mezcla de imaginación, aprendizaje y magia, encantamiento, todas
esas cosas buenas que ustedes sienten cuando son niños y se permiten
asistir a la programación infantil.
Ustedes, allí, están entrenando el arte de crear la realidad, deliberada y libremente.
Y
lo que deseamos para este día es que entiendan nuestras palabras. Y
más, que se comporten como un niño, que se entrega a la pura magia, de
forma inocente, integral, sin reservas, sin resistencias.
Muchos de ustedes (la mayoría) sueñan con algo específico, mentalizan, se sienten bien al verse realizando tal sueño.
Y
enseguida regresan a sus vidas normales y en poco tiempo, nuevamente,
están interactuando con el medio en la vibración de antes de despertar
la energía del sueño, del deseo.
Basta un poco de tiempo insertados en el contraste para quebrar el encanto que pusieron en sí mismos.
Y siendo así, no puede venir a ustedes, la realización no puede suceder.
Porque
no basta activar la magia, precisan volverse comprometidos con ella,
diariamente, así como un niño que espera el momento de asistir al dibujo
animado.
Mientras
el episodio es transmitido, él se entrega y se permite visceralmente,
participar de todo aquello que ve, alegremente y con los ojos fijos en
la TV, es como si el mundo lúdico de la programación y el de él, el
real, se fundieran en uno solo. Hay una entrega completa e incondicional
allí.
Mientras tanto, eso no se resume solamente al momento en que asiste al dibujo animado.
Así que termina, y el niño sabe que al otro día estará la secuencia de la historia.
Y
desde el momento en que el episodio del día acaba hasta que el otro sea
transmitido al día siguiente, él estará profundamente envuelto en la
magia que el dibujo le despierta. De forma que sus pensamientos recorrerán la trama.
Y sus asuntos, comportamientos y rutina pasan a ser fundamentados en la pasión por aquel dibujo.
Y
más, al salir de su casa y encontrarse con sus otros compañeros, que
también comparten la misma pasión, los juegos, conversaciones,
interacción, girarán en torno de la historia de aquel dibujo animado,
que simplemente fascina a todos ellos.
Eso de hecho ocurrió en la infancia de Vinícius y de muchos que tienen su edad, saben de lo que hablamos aquí.
Y
acompañamos cada paso de eso, fluyendo en toda la energía buena de la
pasión, alegría, imaginación y magia que eso provocaba en él y en tantos
otros millares y millares de niños.
Pero,
de hecho, cuál es la enseñanza que pasamos aquí? Bueno, enviamos una
pregunta: Qué hacía que toda aquella magia y encantamiento fluyera
simplemente permitiendoles el bienestar de tal manera? La ausencia de la
resistencia. Había allí simplemente un pleno permiso.
Y qué sucedería si ustedes, hoy, fluyeran en la creación de sus sueños con la misma entrega?
Qué
ocurriría si simplemente se dejaran llevar por la magia que vuestro
deseo les provoca al pensar en él y al enfrentarse con la manifestación
de él en la vida de alguien por ahí?
Pero,
no es eso lo que sucede en la mayoría de los casos. Ustedes piensan en
el deseo y la sensación en ese momento es muy agradable.
Sin
embargo, poco tiempo después, las disculpas, ansiedades, miedos,
preocupaciones, y creencias asentadas en un contexto social y material
los hace perderse de todo el encanto. Y todo regresa al punto inicial.
Nos gustaría que se dejaran llevar solamente por la magia del deseo y olvidaran todo el resto.
No
importa lo que sucede en el mundo, sigan la pasión, el entusiasmo,
entréguense al encantamiento y la alegría que vuestro sueño les causa.
Y
así como un niño que espera un día entero para acompañar nuevamente a
su dibujo favorito en la TV, vivan vuestra rutina diaria entregados al
deseo puro y al sentir puro.
Ustedes perciben que la magia del dibujo pasa a ser el foco de casi todo lo que el niño hace durante el día?
Entonces, qué tal hacer eso en relación a vuestros sueños? No pedimos
que piensen insistentemente en ellos, sugerimos que sientan
insistentemente la magia de eso, que se dejen llevar insistentemente por
la emoción positiva, por el encantamiento, por las sensaciones,
insights, todo aquello que los mantenga conectados con la magia de
vuestro sueño.
Así
como un niño, interactúen con asustos referentes a ese alineamiento,
conversen con personas que también estén involucradas en ese mismo Bien.
Que vuestras tareas sean vueltas y fundamentadas también en él. Ávidos, felices, confiados.
Porque el niño se entrega a la magia del dibujo y en ningún momento duda que conseguirá asistir a un nuevo episodio.
Y
se siente muy bien justamente porque cuenta con eso y visceralmente
sabe que tal momento llegará. Y es esa certeza que no lo hace someterse a
las malas emociones.
Porque
cuando están seguros, no hay incomodidades. Simplemente hay una
sensación pura y envolvente de “Va a llegar, va a suceder”.
Y
en esa confianza plena, ustedes atraviesan vuestros días, tratando
aquel sueño como un episodio del dibujo favorito de un niño, que ya está
programado para ser transmitido por la TV.
Inevitablemente será transmitido. Y transfiriendo eso a sus vidas, inevitablemente el sueño será realizado.
Ahora,
todo es una cuestión de cultivo del bienestar, de la alegría, del
entusiasmo que no crea ansiedad, porque él no está fundamentado en
incertidumbres.
Sólo sienten ansiedad o tensión cuando no se encuentran en la certeza.
Pues
la certeza es leve, es fluída y les permite navegar en la magia del
sueño sin crear con eso una resistencia, sin sumergirse en la
insatisfacción de no poder aún, vivirlo.
No,
ustedes no actúan así. Porque lo que de hecho les importa, no es
simplemente ver su sueño realizado, una vez que aprendieron el secreto
con el niño de nuestra ilustración.
Y él consiste en abrazar la magia y no vivencias propiamente su manifestación.
Porque si el niño pensara así, él no se permitiría atravesar el día entero, inmerso en aquella agradable expectativa.
Y él lo hace porque lo que importa es abrazar la magia y no asistir al dibujo propiamente.
Y
cuando ustedes vivan así, todo será muy diferente. Y vuestros días
estarán repletos del encantamiento que brota de la certeza absoluta.
Y ésta, a su vez, los sumerge en la alegría de envolverse con todo el encanto del sueño.
Al final, es la magia lo que interesa, y el sentir que importa y no el sueño materializado propiamente.
Porque si supieran entender eso, comprenderán que desean la manifestación simplemente para comulgar en ella con magia plena.
Entonces,
sugerimos que se entreguen a ella ahora mismo. Y como un niño, sean
ávidos, plenos, alegres, llenos de expectativa positiva.
Viviendo
naturalmente vuestra vida, sin ansiedad, sin pensar demás en las cosas
que quieren, pero entregándose a la magia, puramente.
Porque
sólo piensa mucho en el deseo quien no se permite sumergirse en la
magia de vivirlo en sus emociones y en sus sentimientos ahora mismo.
Pues
quien se permite vivienciarlos vibratoriamente en todo su encantamiento
y bienestar no está volviéndose a pensar en el cómo, en el cuando ni en
el a través de quién vendrá.
No le importa el cómo todo fluirá ni pierde tiempo en ilusiones sobre el mañana.
Sino que vive su hoy, las cosas de ahora, pero se mantiene conectado en el sentir. Tan sólo en el sentir.
Y ese sentir, esa magia, hace que sean su pulsar más fuerte a cada instante.
Porque
sabe que la manifestaci{on vendrá y mientras no viene, el individuo
vibra en la magia pura y la comparte con el mundo, así como un niño que
confiado y alegremente espera por la transmisión del próximo episodio de
su dibujo animado favorito.
Amamos esta interacción.
Haya Luz!
ELOHIM
A través de Vinícius Francis
Traducción – Aleojah Silah (Shanti)
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