martes, 3 de julio de 2012

Arcángel Uriel: Ustedes son dignos de los obsequios del Cielo

AA. URIEL :- Ustedes son dignos de los obsequios del Cielo


AA. URIEL:
Ustedes son dignos de los obsequios del Cielo
27 de junio del 2012.

El camino a la ascensión está fraguado de retos, y para la mayoría de ustedes esto se ha extendido a incontables vidas encarnados en forma de un humano. Lo que ustedes conocieron alguna vez como la "Rueda Kármica" ya ha dejado de girar, y en su lugar encontrarán que se están embarcando en un diferente tipo de viaje.  
Este es una trayectoria de sanación y recuperación.  
Una en la que ustedes se embarcan no tanto para arreglar alguna indiscreción previa, sino para redescubrir y reintegrar todos los aspectos del Yo, y para erguirse de pie en la plena realización de quién y qué son ustedes verdaderamente.  Entonces el truco se vuelve en realidad en ser ese Yo; en trabajar en lo que hacen con su tiempo, en sus tratos con los demás, en las palabras que hablan y el nivel de confianza que tienen en su propia perfección.  
Su papel en esta vida ha cambiado drásticamente en estos últimos meses. Se ha llevado a cabo una gran transformación, ya sea si se dan cuenta de ello o no.  Donde antes su lección era simplemente ir del punto A al punto B tan rápidamente como fuera posible,  para luego regresar a hacer todo de nuevo, ahora en el año 2012 el juego ha cambiado.  El curso en el que están ya no es uno de supervivencia y reparación de acuerdos contractuales que salieron mal.  
Pudieran igualar su previo yo a un hámster en una rueda que él hace girar y girar hasta colapsar, no llegando a ningún lado y logrando muy poco de valor.  El gira una y otra vez por el mismo curso y se pregunta por qué no progresa, a pesar de su arduo trabajo.  
No es sino hasta que desacelera y se sale de la rueda que ve su senda por lo que era realmente.  Ve que el correr en los mismos círculos, en la misma formación, día tras día mientras presta poca atención a lo que está sucediendo a su alrededor, nunca le traerá nuevos y mejores resultados.  
Se da cuenta entonces de que todo ha sido un ejercicio en futilidad, y que simplemente ha estado jugando todo este tiempo el juego de otro.  Así que ahora depende de ustedes, sálganse de la rueda.  Sean osados y embárquense a cambio de eso en su trayectoria personal de autodescubrimiento y satisfacción.  Permítanme asegurarles que ustedes son mucho más  de lo que este mundo les ha conducido a creer.  
Ustedes son poderosos.  Sabios.  Invencibles.  Sagrados Hijos de Dios. Cada uno de ustedes es una pieza irreemplazable de la Totalidad del Universo, y no hay ninguno de entre ustedes que no sea digno de los obsequios del Cielo.
Ustedes han pasado a través de las pruebas de la Era de Piscis con gran éxito, pero tuvo una manera de agobiarlos y hacerlos descender, ¿tengo razón? En vez de tomarlo como merecedores de ello, la obtención de las necesidades básicas de la vida se volvió en algo como un premio.  Más como una excepción a la regla que como sus derechos equitativos como ciudadanos de la Tierra.
Solamente en la Tierra ustedes tienen que batallar por su pan y por su cobijo.  Ninguna otra sociedad en el cosmos opera bajo dichos tristes principios de “supervivencia del que mejor se adapta” y “mata o serás matado.”  Comprendan que esta entera manera de pensar es retrógrada.  Como un hijo de la Madre y el Padre, éstos son sus más básicos derechos.  
Ustedes se merecen ser amados y cobijados y cuidados, pues estos conforts son suyos como seres soberanos de la Luz.  Y no obstante, las astutas tácticas de lavado del cerebro meramente de unos pocos han doblegado a una población de billones.  Ellos les han dicho que deben pelear para ser dignos, para que tengan éxito, y ustedes los creyeron.  Ustedes creyeron que debían competir por lo que es legítimamente suyo.  
Les han dicho quiénes deben ser y adónde ir y qué es lo que deben lograr para ser aceptados.  La razón por la cual ha sido una batalla cuesta arriba para la vasta mayoría de la gente tiene que ver con las metas que estos otros seres fijaron para ustedes mediante los medios que ellos les dijeron que debían buscarlos.  No tiene absolutamente nada que ver con sus talentos o habilidades o valía a los ojos de Dios.
Debido a que han sido engañados a pensar que la cantidad de riqueza material que obtengan es un barómetro de su propia valía,  tantos de ustedes sienten que no han satisfecho las expectativas de la sociedad, que de alguna manera han fracasado.  Se han medido a sí mismos con estándares inalcanzables y sin sentido.  
Ya sea que hayan buscado la satisfacción a través del logro profesional, conquistas románticas, galardones académicos, belleza física o los artículos que adquieren, han encontrado que nunca les trajeron ese elusivo sentimiento que han estado buscando.  Estas cosas nunca los hacen sentir completos.  No los traen más cerca de Dios.  
Examinándolos más de cerca, notarán que cada una de estas cosas están basadas en principios de competitividad y exclusividad, y en un fundamento de juicio/crítica.  Ustedes podrían hacer girar sus ruedas para siempre en persecución de estas cosas, queridos amigos, pero nunca los satisfacerán. Ellas nunca les traerán la paz.
La verdadera satisfacción yace en el fortalecimiento de su conexión con el Todo Lo Que Es.  Yace en el núcleo de su ser, en el espacio de su corazón, y a través de su amorosa conexión entre ustedes y otros.  Yace en el crecimiento espiritual, la compasión por todos y la aceptación de la verdad.
Vean ante sí la manera de la Nueva Tierra. 
Aunque, en toda honestidad, debo decirles que  ésta es realmente la más vieja manera de todas. Esfuércense por lograr sus metas, pero no tratando de ser mejores que otros sino mejorándose a sí mismos y siendo su mejor Yo.  Es dándose cuenta de su conexión natural con la Divinidad como florecerán sus habilidades de manifestación.  
La nueva manera es crear de corazón y no de la mente del ego.  Se hace a través de la comprensión de que ustedes ya son perfectos, y no necesitan probarse a sí mismos a nadie.  En la 5a. sociedad dimensional a la cual se dirigen,  desde el principio se les conoce como los magníficos seres que son, nada está oculto.  Su gloria brilla ante todos para admirarla. 
Comiencen ahora a salirse de la rueda y presten cuidadosa atención a todo lo que creen ser verdad.  Elijan una dirección y visualicen un brillante nuevo mundo y su hogar de la 5a. dimensión, y reflexionen sobre el papel que desean desempeñar dentro de él.
Visualicen esto diariamente y con una gran convicción.  Luego comiencen a dar esos primeros y torpes pasos que son, sin embargo, necesarios para hacerla realidad.  Esta es la definición misma de la ascensión.  Este es el verdadero significado del éxito.
Hasta que hable con ustedes de nuevo, les deseo una amorosa y abundante trayectoria. Namaste.
Traducción: Gloria Mühlebach
Copyright © Bella Capoz

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