lunes, 9 de diciembre de 2013

O.M. Aivanhov, Avivando el ánimo

O. M Aivanhov - Avivando el Ánimo ...



O. M Aivanhov
Avivando el Ánimo
3 de diciembre de 2013
                                                               
  
Un mensaje especial de avivamiento y lucidez para todos los hermanos y hermanas, en esta Red de conciencias cristalinas!
Saludos. Yo soy el que fue conocido como Omraam Mikhail Aïvanhov. Bendiciones y paz a todas las Chispas Divinas.
Hermanos, hermanas míos, a todos aquellos que oirán estas palabras, mi Presencia en esta oportunidad que la vida proporciona, tiene como objetivo fortalecer las paredes que nuestra Madre Divina ha levantado por medio de su acompañamiento amoroso, a través de su firme Presencia, y sin embargo, suave, en torno a cada uno de sus hijos e hijas sobre esta Tierra.
Mi Presencia ígnea, en vuestra Presencia ígnea, se destina a estimular y fortalecer el ánimo, se destina a fomentar- animar- y reavivar el Fuego de esta devoción. Esta devoción no debe ser confundida con la adhesión a un ideal de perfección, con la adhesión a una aspiración por un comportamiento ejemplar, como estas cosas pueden ser entendidas por la mente humana. Esta devoción es la entrega de sí, esta devoción es la entrega completa y total de sí mismo a este Amor sin fronteras, a este Amor sin condicionamientos, este Amor sin límites.
El tiempo y los actos desempeñados en las líneas del tiempo, son simplemente un fenómeno de la propia Conciencia. Los lugares, los escenarios, son sólo proyecciones en el espacio infinito de la Conciencia misma. Las demarcaciones de un tiempo y un espacio que suceden a través de las experiencias perpetradas en la danza de la propia Conciencia, no deben establecerse allí como un hecho verdadero.
Mucho más que abrir los ojos, ustedes necesitan abrirse a sí mismos, para vivir ahí, donde ésta Llama que vengo animar habita, un encuentro sin igual consigo mismos. Entonces todo el poder que el tiempo, todo el poder que los escenificaciones que se producen en el tiempo, parecen tener sobre ustedes, caerán. Este poder es sólo vuestro propio poder como creadores y creadoras universales.
Este ánimo que vengo a inyectar a través de mi Presencia en su Presencia, no es un cuestionamiento mental a toda la puesta en escena  en estas líneas de tiempo. Este ánimo que vengo a inyectar no es un repudio a la propia representación. Este espíritu que vengo a inyectar a través de ésta Presencia ígnea que en este momento nosotros  compartimos, tienen como objetivo despertar en ustedes el placer del reencuentro consigo mismos.
Sí, yo estoy consciente de que este es un término capcioso, no importa. Si ustedes se dejaran consumir por esta Llama Eterna, que arde en sus corazones, toda duda y confusión se desvanecería, porque este placer luego se convertirá en un Éxtasis, sí, porque el placer es momentáneo, el éxtasis es implosivo. Pero incluso este éxtasis que sólo surge de la aparente relación de elementos, y claro, no hay elementos, sólo ustedes, y luego este éxtasis se transformará en absoluta Bienaventuranza, pero hay que redescubrir o reafirmarse si ya redescubrieron, el hilo del placer del reencuentro.
El camino que no es un camino, no es una entrada de piedras puntiagudas. El camino que no es un camino, que no es la corona de espinas que la moralidad y la religión transformaron en gran pesadilla! El camino que no es un camino, es un campo de flores abriéndose constantemente, exhalando su más prístino perfume.
¿Dónde está el regocijo? ¿Dónde está la verdadera Alegría que no se deja conmover, que no se deja afectar por pequeñas decepciones de una vida limitada? ¿Dónde está el gozo y el júbilo de los seres despiertos que realizan su Realidad Última? ¿Dónde está la Bienaventuranza de la Liberación?
Ustedes pasan por la experiencia en este mundo, día a día, como  barcos que no tienen un capitán, a la deriva, a favor de los vientos y las tempestades. ¿Ésta es vuestra realidad? ¿Son de hecho barcos sin capitán?  ¿Dónde está el que maneja el timón? ¿Quién será éste que maneja el timón? ¿Dios allá en el cielo?  ¿Cristo allá en el Sol?  ¿Yo en el suelo? No!, ninguna de estas alternativas.
¿Quién maneja vuestro barco? Huummm ... Dense cuenta de la maravilla de la realización de este hecho, cuando ustedes se redescubren como la plena potencia, como siendo por sí mismos, en sí mismos, el inicio y fin de toda Danza; al abrir los ojos a la magnificencia de su deidad, se dan cuenta que son el conjunto de todas las posibilidades. Y vean que ellas son infinitas!  
¿Entonces ustedes son infinitos? No, ustedes son algo para lo que no hay una palabra, son algo para lo que no hay representación, ni en este mundo ni en los mundos  de la pura Luz, porque todos son sólo reflejos de la misma magnificencia que ustedes Son.
¿Dónde está entonces el motivo para la desesperación? ¿Dónde está el sentido del llanto? ¿De la guerra? ¿Del Conflicto? ¿De la discordia? ¿Dónde está la semilla de la decepción? ¿De dónde surge este fruto no reconocido?  Sí, porque nadie quiere asumir la responsabilidad por él. Es mucho más fácil crear un dios y un diablo y culparlos por toda la luz y toda la sombra.
El camino que no es un camino, el reencuentro con esta magnificencia pasa por asumir la responsabilidad por las espinas que nacen en las rosas que exhalan el prístino perfume. ¿Contra quienes ustedes luchan? ¿Quién es el enemigo? ¿Quién es el oponente en este campo de batalla? ¿Será que la vida de repente se transformó en eso, se resume a eso? ¿Luchar contra lo indeseable, proclamar la victoria del sueño? ¿De lo ideal?
Permítanme recordarles algo: La vida no es, nunca fue y nunca será un campo de batalla. En la vida no hay partes guerreando. En la danza, ésta limitada, como la ilimitada, están sólo ustedes. Tú, más específicamente. Tú que eres el origen y la culminación de todas las creaciones. ¿Dónde hay espacio para un enemigo? ¿Dónde hay espacio para un combatiente? Y me gustaría que ustedes aprovechasen y consiguiesen transferir esta visión que yo les presento en la más obvia de sus experiencias, en el nivel más superficial de la existencia, que es esta danza alocada que ustedes viven en este cuerpo de carne y hueso.
Mira la dimensión del escenario, ¿cuántos otros escenarios, él puede  acoger!  ¿Y ustedes se dejan conmover por un evento en este pequeñísimo escenario que está contenido en tantos otros, y siendo ustedes el origen de todos ellos? ¿Qué adelanta redescubrir la capacidad de transitar por los escenarios, si continúan identificados a la ilusión de una identidad fija? ¿De qué sirve un cielo si "Pedro" y "Juan" seguirán existiendo en él, como 'Pedro" y "Juan"?
Anímense! Una gran fiesta está sucediendo a su alrededor! Sus dedos  tocan esta realidad maravillosa y luminosa, pero los ojos parecen aun volverse hacia la sombra que los propios cuerpos proyectan.
Cierren los ojos, cierren los ojos... ¿Ustedes logran percibir lo que yo percibo ahora? ¿Ustedes logran sentir, por el sentir curado y rectificado del Corazón, la vida que palpita en cada átomo de su cuerpo cósmico? Basta eso, basta un momento de todo eso y todos los fardos de una vida contenida entre el nacimiento y la muerte se deshacen. Dejen  las cargas caer constantemente, porque el camino que no es un camino, no es una corona de espinas, es un campo de flores que se abren exhalando olor de santidad.
Los dejo, Rosas del Divino Corazón de la Madre, pero nunca los dejé, porque vivo allí, donde la Llama Eterna quema. Sean bendecidos, hasta otra oportunidad.
Transcripción realizada por colaboradores del Agnisangha
Revisión final: Agnimitra.
Traducción; H. N.

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