MARÍA MAGDALENA: LA BATALLA DE LOS SEXOS
Canalizado por Pamela Kribbe - Junio de 2012
Queridos amigos, queridos hermanos y hermanas:
Estoy
plena de alegría de estar aquí en este lugar con ustedes. Mi corazón
realmente se abre porque los amo mucho. Ahora estoy libre de las cargas
terrenales. Y fácilmente puedo ver vuestra belleza y el coraje a medida
que avanzan en su vida en la Tierra. Desearía que pudieran verlo ustedes
mismos. Con frecuencia están habituados a juzgarse y a menospreciarse.
Esto hace que sea difícil recibir todo lo que se les da. A menudo puedo
ver que su energía está atada a un nudo. Sus ojos están cerrados y están
aprisionados en sus propios juicios negativos. Y es de esperar que
todos ustedes tengan que tratar con esta sensación de desmerecimiento en
cuanto nacen en la Tierra.
Es
parte de estar en la Tierra. De hecho la Tierra está cubierta, a nivel
energético, con una sensación de auto-menosprecio y juicio que pasa de
generación a generación. Algunas personas han tenido la bendición de
haber experimentado en la infancia la sensación de inocencia y de
espontaneidad que es natural a la vida. Pero con frecuencia cuando
encarnan en la Tierra como un ser humano su conciencia se nubla
fácilmente por la negatividad y el miedo que hay aquí.
Yo
estoy aquí ahora para recordarles su verdadera naturaleza y para
ayudarlos a despertarla en su vida diaria. Porque incluso si la energía
de la Tierra puede ser muy densa y pesada, yo conozco la fortaleza de
sus almas. Ustedes realmente son guerreros de la luz, incluso si a veces
parecen haberlo olvidado. Por momentos yo siento pesar por ello, y
tristeza al verlos sentirse tan perdidos. Yo aún tengo sentimientos
humanos, ustedes saben, y estoy conectada a ustedes desde mi corazón.
Hoy
quisiera contarles una historia acerca de lo que sucedió entre los
sexos, entre los hombres y las mujeres, porque mucha de la energía
oscura, o la sensación profunda de desmerecimiento tiene que ver con
esta historia. Esta historia está relacionada con el área de la
sexualidad. Y ustedes saben, la sexualidad debería ser una fuente de
luz, de amor y un genuino encuentro de almas. En un encuentro sexual
verdadero ustedes se abren desde el corazón. Es una experiencia de
arrobamiento y éxtasis encontrar a una persona en ese nivel. Pero
trágicamente, pocas personas en la Tierra pueden experimentar la unión
sexual de esta manera. Hay mucho dolor profundo en los corazones tanto
de hombres como de mujeres en esta área, porque es en el área de la
sexualidad donde
ustedes son más vulnerables como un ser humano.
Todos
ustedes son conscientes de la historia reciente, y por reciente quiero
decir los últimos cuatro a cinco mil años. Durante este periodo de
tiempo, la energía femenina fue desvalorizada y humillada por una
energía masculina agresiva. En el ser femenino esto ha creado una herida
a un nivel muy profundo. Pero también ha herido a los hombres.
Debido
a esta energía masculina agresiva que estuvo presente a lo largo de
esta era, los hombres no fueron capaces de desarrollar su lado sensible,
femenino. Se volvió difícil para ellos conectarse con otras personas
desde el corazón, mostrar sus emociones. Las mujeres por otro lado
perdieron contacto con su sensación de autoestima y de empoderamiento.
Como resultado de esto, los hombres y las mujeres se volvieron extraños,
alienados unos de otros. Y el área de la sexualidad, la cual es la más
sagrada entre el hombre y la mujer, llegó a ser violada. En lugar de
dichosa, se volvió un área de gran dolor.
Ahora
quiero ir un paso más adelante y contarles sobre una parte de la
historia que es más vieja que la conocida por ustedes. Ha habido épocas
en las que las mujeres tomaron el poder y lo ejercieron sobre los
hombres. Las mujeres pueden sentir esto dentro de ellas mismas. Incluso
si han sido víctimas de la agresión masculina en muchas vidas, ellas
también pueden sentir la habilidad dentro de ellas de manipular la
energía en los hombres.
De
ninguna manera estoy diciendo esto para hacerlas sentir culpables o
avergonzadas. Quiero ir a la esencia de la herida en hombres y mujeres. Y
entonces les pido ahora que sientan por dentro si ustedes reconocen en
su interior la herida de la que les estoy hablando. ¿Es posible para
ustedes sentir verdadero amor en las relaciones con el otro sexo?
¿Pueden ser mujer u hombre sin avergonzarse, sin reservas hacia el otro
sexo?
Les
estoy diciendo que la sensación de desmerecimiento con la cual todos
ustedes están luchando está muy relacionada con la herida sexual tanto
en hombres como en mujeres. Ahora es el momento de sanar esa herida. Y
les pido especialmente a las mujeres que se eleven por encima de las
cuestiones de ira y de desconfianza que experimentan hacia los hombres.
Ustedes, tanto hombres como mujeres, han sido ambos víctimas y verdugos
en esta larga historia de batalla.
Imaginen
conmigo que están enfrente de su amante, y si no tienen uno,
simplemente imaginen a alguien parado ahí. Ahora primero échenle una
mirada al flujo de dar: ¿qué le están dando a esta otra persona, qué son
capaces de dar? Y observen bien su propio cuerpo mientras dan esta
energía. ¿Cómo se siente en su corazón, cómo se siente dentro de su
abdomen? Y si sienten que el flujo de dar se interrumpe en algún área,
no lo juzguen, no traten de cambiarlo ahora, simplemente obsérvenlo.
Ahora miren el flujo de recibir. ¿Qué están recibiendo de su pareja; qué
son capaces de recibir de su pareja, qué pueden recibir?
Probablemente
verán que dentro de ustedes hay áreas en ambos flujos que están
bloqueadas. Deben saber que estos bloqueos no son sólo sus bloqueos
personales. Ustedes los han heredado de la historia. De modo que no se
juzguen por ellos. Lo que están invitados a hacer en estos tiempos, es a
sanar ese dolor, y al hacerlo así ayudarán también a sanar el dolor
colectivo de la humanidad. Ustedes son mucho más fuertes de lo que
ustedes mismos creen ser.
Los
invito a hacer un pequeño ejercicio de sanación conmigo. Ahora no les
estoy pidiendo sanar el dolor o los bloqueos que perciben en ustedes.
Les estoy pidiendo que observen el dolor o los bloqueos en su pareja. Háganlo
muy simple. Tan sólo pregúntenle a su pareja: ¿qué quisieras recibir de
mí? ¿Qué es lo que más te serviría, qué te ayudaría a empoderarte en tu
vida? Dénselo a él o a ella a nivel energético.
Quisiera
que ustedes comprendan a su pareja, especialmente comprender el dolor
específico del sexo opuesto. La herida o el dolor son diferentes en
hombres y en mujeres. Los hombres se han enajenado de su propio lado
sensible, su propia naturaleza femenina. Ellos añoran una mayor conexión
verdadera. Y las mujeres necesitan conectarse otra vez con su propio
poder y autoestima. Los hombres pueden ayudar a las mujeres a hacer esto
mostrándoles su verdadera belleza y fortaleza. Las mujeres pueden
ayudar a los hombres perdonándolos y tomando responsabilidades por ellas
mismas. Puede haber una interacción muy hermosa entre hombres y
mujeres.
Aunque
el camino espiritual tiene que ver básicamente con sanarse a ustedes
mismos, ahora es tiempo de unir las manos y de construir puentes entre
hombres y mujeres. Es teniendo verdadera compasión y comprensión entre
unos y otros que ustedes realmente también se sanan a ustedes mismos. Se
alzan sobre la vieja batalla y nuevamente le permiten al área de la
sexualidad volverse un área de verdadera alegría y compañerismo.
A
medida que luchan con la oscuridad interior y con la sensación de
desmerecimiento, les pido que consideren en qué medida esto es debido a
sus heridas como un hombre o como una mujer. Siendo conscientes de estos
aspectos, logran más comprensión de ustedes mismos y permiten más luz
en sus vidas. En la Nueva Tierra que está naciendo en estos tiempos, los
hombres y las mujeres se unirán otra vez en armonía. Sus energías
naturalmente se complementarán una con otra. Es en el área de la
sexualidad que su alma, su energía espiritual, verdaderamente baja a la
Tierra, desde el centro energético más elevado hacia el más bajo.
Cuando
hay unión sexual de corazón a corazón, ustedes regresan al centro del
paraíso. Por un momento se sienten uno con el Espíritu. En ese momento
de unión, ustedes canalizan la energía más pura hacia la Tierra.
Originalmente la sexualidad es un precioso regalo. El hecho de que se
haya enturbiado con energía oscura y dolorosa es una gran carga para
todos ustedes. Es la causa de muchas de sus emociones de soledad y de
desesperación. Pero hay muchos signos de esperanza en esta época.
Hombres y mujeres están genuinamente buscando establecer una verdadera
conexión unos con otros. Hay una carga pesada en todos ustedes, pero
también un gran potencial para la sanación.
Nuevamente,
los invito a verse a ustedes mismos como yo lo hago desde el otro lado
del velo. Les pido que sean uno conmigo ahora y que se vean a través de
mis ojos. ¿Pueden verse a ustedes mismos como las almas hermosas y
valientes que son? No hay nada malo en ustedes. ¡Nada! Son seres
perfectos.
Deseo que puedan aceptar eso de mí.
© Pamela Kribbe 2012
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.